f𝐎re𝐕𝐄𝐑 *•. {Corrigiendo}

.•* Capítulo 11, el baile *•.

~BAILE EN MULTIMEDIA~

...

🕰~ 20:30

—¡ELISABETH CAROL SMITH! —me gritó Natalia pegada a la puerta de mi habitación.

—NOO, NOO Y NOO —le grité yo.

—QUE NO TE LO VOY A HACER EXAGERADO, TE LO JURO —me gritó ella, pero siguió sin convencerme.

—¡NO QUIERO PARECER UN PAYASO! —le grité otra vez.

—SI TE MAQUILLO COMO UN PAYASO ME PEGAS ¿VALE? —me gritó ella para que yo aceptara.

Mmm, interesante propuesta...

Yo ya iba con el famoso vestido rojo puesto, se ajustaba perfectamente a mi cintura, la dependienta tenía razón, parecía que estuviera hecho para mí. Fue amor a primera vista.

La conversación anterior vino a que yo no quería maquillarme de forma chillona, no me gusta destacar, y Nat quería maquillarme, y no me fiaba de ella...

—Vaaaale, esta bien, ya salgo —le dije a Natalia mientras abría la puerta.

—LIDIA AHORA —dijo Nat a la vez que cada una me cogía un brazo.

Me llevaron al baño y a la vez que Nat me maquillaba, Lidia me hacía un peinado.

El maquillaje quedó sencillo, justo cómo quería, un poco de base, rímel y pintalabios rojo.

Y Lidia me hizo un pequeño recogido en en pelo, dejando a destacar mis pequeñas ondulaciones.

—Chicas... me encanta —confesé emocionada y ellas chocaron sus manos.

Se quedaron mirándome de arriba a abajo un rato hasta que se les iluminaron los ojos.

—LOS ZAPATOS —dijeron a la vez.

Estas salieron corriendo fuera del baño, y volvieron con unos tacones negros, yo estoy acostumbrada a llevarlos ya que voy a muchas comidas de mis padres...

Me los puse y ellas me miraron sonrientes.

—Estas preciosa —dijo Nat mientras Lidia me daba una vuelta.

—Gracias a vosotras —le conteste sonriendo.

🕰~ 20:55
Tok, tok, tok

—Tu príncipe azul ya ha llegado —me dijo Natalia.

—Al menos es puntual —dijo Lidia rodando los ojos a lo que Nat y yo reímos.

Fui a abrir la puerta y vi a Naim con un traje azul marino que le hacia sentir genial.
Naim se quedó con la boca abierta y Natalia se la cerró.

—¡Naim! Cierra la boca que entran moscas —le dijo Natalia.

—Ja ja ja —hizo una risa falsa Naim —¿no tengo a la amiga más guapa del mundo? —dijo haciendo un gesto señalándome.

—¿Te acabas de dar calabazas? —comentó Lidia y Natalia rió ampliamente.

—Adiós chicas —dije asesinándolas con la mirada —nos vemos allí.

Ellas cerraron la puerta y Naim me ofreció su mano y yo se la agarré (LA MANO, MENTE SANA RECUERDEN, MENTE SANA)

—¿Sabes? —empezó él una conversación mientras íbamos de camino al coche —nunca te imaginé con un vestido, me gusta como te sienta —dijo él algo sonrojado.

—Gracias Naim, a mi me gusta mas que lleves la ropa de siempre, tus brazos se ven mejor destapados —dije guiñándole un ojo y él sonrió pícaro —sabes... me encanta que no seas tan egocéntrico como todos los chicos, y que te sonrojes cuándo alguien te dice un piropo, eso indica que no lo tienes creído... —le dije a Naim.