f𝐎re𝐕𝐄𝐑 *•. {Corrigiendo}

.•* Capítulo 23, las hormonas *•.

Abe y Marcos se fueron dejándonos solos.

- Apoyo al 100% tu relación con Seve, está más feliz que nunca - me dijo y yo sonreí como boba.
- Gracias - dije y él sonrió.
- Sabía que más tarde o más temprano acabaríais juntos - dijo Victor - pero cuidado con JJ y Guillem, tienen planeado entrometerse en vuestra relación - me advirtió Victor.
- Tranqui Vic, ya lo hablé con Seve - le dije.

Volvimos junto a todos y pude ver a Guillem muy molesto, veo que Natalia tiene muchas cosas que contar.

Cuando llegamos junto a todos, me acerqué a Seve y el me abrazó por la cintura.

- ¿Todo bien? - me susurró en el oido.
- Sí - le susurré yo esta vez y él se estremeció - mmm ¿qué pasa bebé? - le pregunté mordiéndole el lóbulo de la oreja.
- Uff - suspiró y yo reí - no lo hagas - me dijo.
- ¿Hacer el qué? - dije tocando su marcado abdomen ya que estaba sin camiseta.
- Ves eso de allí - dijo señalando el vestuario - como no pares te voy a tener que llevar allí - me dijo y yo reí.
- ¿A qué? - le pregunté - ¿a cambiarme la
ropa? - dije haciéndome la inocente.
- Más bien a quitártela - susurró en mi oído de forma muy sexy.
- Mm tentador - dije y él rió.
- Tórtolos dejaros ya el coqueteo que seguimos con el entrenamiento - dijo el entrenador, no era joven, podría ser hasta mi padre, cuando me vio automáticamente sonrió - Elisabeth Smith, un gusto - dijo ofreciéndome la mano y yo se la di y él me la besó, raro.
- Quien diría que escondías ese talento - dijo - te vi jugar en el partido, y la verdad es que juegas mucho mejor que estos catetos - dijo señalando a los chicos.
- OYEE - dijeron y el entrenador y yo reímos.
- Pues muchas gracias - le dije.
- Te puedes venir a entrenar cuando quieras, aquí siempre tendrás un sitio - me dijo el entrenador.
- Se lo agradezco muchísimo - dije - va hoy me quedo que no tengo nada que hacer - dije y él sonrió.
- ¡Genial! - dijo él.
- Carol nosotras nos vamos - dijo Natalia.
- Vale Natasha, luego me cuentas - le contesté guiñándole un ojo y ella rió y se fueron.
- Me voy a cambiar, ahora vuelvo - les dije y fui a los vestuarios.

En el vestuario de chicas tengo una taquilla donde metí unos cuantos conjuntos de deporte y volví con todos.

Cuando llegué algunos se me quedaron mirando...

- Se mira pero no se toca - dijo Seve poniéndose delante mío y yo reí.
- A VER VIRGOS, RELAJAR LAS HORMONAS Y A ENTRENAR - dijo el entrenador y todos dieron un pequeño salto.

Empezamos a entrenar, hicimos algún que otro partido hasta que el entrenamiento se terminó.

- BUEN ENTRENAMIENTO CHICOS, A LOS VESTUARIOS - dijo el entrenador y estaba por irme cuando me agarra la mano.
- Gracias por devolvernos al Seve de siempre Elisabeth - dijo contento y eso me hizo sonreír.
- Me alegra que yo influya de esa manera en él - dije contenta.
- No te entretengo más que las señoritas necesitan su tiempo para arreglarse - dijo él y yo reí.
- Señorita si... - susurré y al parecer me escuchó porque se echó a reír.

...

Me encontraba duchándome cuando oigo la puerta del vestuario abrirse, ¿quién viene a estas horas a entrenar?

Me seguí duchando y cuando salí de la ducha mi ropa no estaba, la de mi taquilla tampoco, al menos me dejaron unos pantalones.

Solo se me pasó una persona por la cabeza... más bien dos... Rivers y Bellido.

Me puse la ropa interior y mi pantalón, que es lo único que dejaron.
Creo que me toca salir en sujetador, si gracias a Rivers y Bellido voy a ganar pretendientes, lo único que han hecho es ponérmelo más fácil el quitarles el puesto de popularidad.

Salí del vestuario y todos me miraron, y era normal, no era usual ver a una chica en sujetador por el pasillo, al menos no había mucha gente, yo busqué con la mirada el vestuario de chicos.

~ ¿Eres boba? El vestuario de chicos siempre está al lado del de chicas ~ me dijo conci.

Uh cierto.

Toque a la puerta del vestuario de chicos y grité.

- VOY A ENTRAR CAPULLOS - grité y me esperé un minuto para entrar y así darles tiempo a ponerse al menos algún pantalón.

Entré y me encontré con todos los chicos con el pantalón puesto, y algunos con camiseta y otros sin, mi querido novio iba en calzoncillos y sin camiseta, yo también se jugar a eso mi vida.

Al verme se mordió el labio.

- Ejem - tosí falsamente y todos volvieron a lo suyo, yo me acerqué a Seve que me miraba con lujuria.
- ¿Todo eso es mío? - dijo mordiéndose el labio y acercándome a él, pude notar que su amigo salió a bailar.
- Uumm, relájate - le dije y él rió - déjame una sudadera que las put4s me han quitado la
ropa - le dije y el rápidamente me puso una.

- Creo que te queda mejor a ti que a mí - dijo sonriendo con ternura, este chico tiene un poder de pasar de sexy a tierno.
- No se hable más, me la quedo - le dije y él rió.
- Me parece bien - me contestó, pensé que se quejaría.
- Madre mía, tienes novia para toda la vida - le dije a la vez que le me lancé a besarlo y él sonrió en él beso.
- Hay ya deja de sonreír - le dije.
- Es lo que tú me provocas - dijo él, entonces volví a besarlo pero esta vez le mordí él labio inferior para que dejara de sonreír y me siguiera el beso, el soltó un gruñido que me puso a 100 y empezó a besarme como solo él sabe, con ternura pero a la vez de forma sexy.

- Me voy con las chicas, Natalia tiene que contarme muuuchas cosas - dije y él rió.
- ¿Y sabes de qué o quién? - dijo levantando las cejas arriba y abajo.
- Ya te contará tu perro - dije mirando a Guillem y al parecer me escuchó porque se acercó desafiante a mí.

- Uy kieto - le dije riéndome.

Fue con intención de revelarse pero Seve lo paró.

- ¿Donde crees que vas? - le dijo Seve a
Guillem - te metes con ella te metes conmigo - le advirtió a Guillem, que mono...
- Sit Guillem sit - le dije de coña y Seve sonrió.
- Adiós boba - dijo dándome un beso en lo labios.
- Nos vemos en la cena - le dije sonriendo y me fui.

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¿Que habrá pasado con Natalia y Guillem? ¿Natalia lo habrá dejado ya?🌚