Sentimiento oprimido.

CAPITULO TREINTA Y NUEVE.

Un vacío, una extraña sensación de que todo lo que has vivido es solo un sueño,  una ilusión, una utopía inexistente que al abrir tus ojos se desvanece entre los recuerdos de tu mente. Una pregunta rondaba silenciosamente en la mente de Jungkook, una pregunta que lo hacía llorar en las noches en medio de un nido improvisado, su lobo llorando y rogando por la presencia de su pareja, del padre del cachorro que crecía en su interior.

¿Era el final? Aquella pregunta atormentaba a Jungkook día y noche, esa simple pregunta le quitaba el sueño junto con su apetito. Se sentía culpable Jimin y Yoongi siempre mirándolo a la distancia con un semblante preocupado en sus rostros, Jin y Namjoon llevándole comida todos los días, comida que terminaba en el inodoro gracias a que su pequeño cachorro no quería retener nada en él estómago de su padre.

Su único soporte era Beomgyu su pequeño niño no le permitía rendirse, y hacia todo lo posible para despertar mejor cada mañana, pero la marca en su cuello no lo dejaba, y le dolía saber que su lazo se estaba rompiendo. No era culpa de Taehyung, inclusive la culpa no la tenía del todo Jennie, la culpa la tenía él por no luchar lo suficiente para estar al lado de su alfa.

Todos le decían que había echo suficiente pero para el no era así, las palabras de la beta calaban profundo en sus miedos y no iba a dejar que aquella basura le quitará lo único que le quedaba de Taehyung, sus cachorros, Gyu y el pequeño que crece en su interior. Ambos ajenos a la situación pero amenazados indirectamente por Jennie y Jungkook temía por la vida de ambos, su instinto animal dejando de luchar en el hospital para darse por vencido y cuidar a su alfa desde la distancia pasando día y noche en el suelo frío de un hospital.
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Cuando Jungkook recobró la compostura, Yoongi lo ayudo a levantar del piso y todos subieron al auto, dejaron a Jimin y a los dos cachorros en casa de Jin, Namjoon juntó a Yoongi fueron con el omega al hospital.

Llegaron a este y Namjoon bajo primero para ir a la recepción, Yoongi tenía que sujetar a Jungkook pues parecía que en cualquier momento el castaño colapsaría. Se estaban acercando a la recepción y a Yoongi le dió un mal sabor en la boca ver qué Namjoon estaba discutiendo con la recepcionista, un mal presentimiento llegando a su cuerpo cuando vio que Jennie se les acercaba con una sonrisa en el rostro.

-  Pero miren a quien tenemos aquí, el discapacitado, el ciego, Jeon Jungkook.

-  Que quieres beta.

-  Oh pero que agresividad Min, solo estoy en el hospital porque mi pareja tuvo un accidente de tráfico- Jungkook sintió su pecho oprimirse, sus piernas intentando fallarle pero no se dejo caer- Pueden creer que tuvieron que reanimarlo en él quirófano, oh además sufrió una gran contusión en la cabeza, puede perder la memoria.

Jungkook tuvo que sostenerse de Yoongi para no caer al piso, mientras que el alfa está intentando no golpear a la jóven, Jennie por el contrario nunca deshizo la sonrisa de su rostro.

Namjoon se acercó con su rostro lleno de preocupación y al ver a la beta supo que todo el problema era gracias a ella.

-  Bueno mi pareja me espera, nos vemos discapacitado- Jungkook dió todo de si para no perder el control pero le fue en vano.

Aprovecho  la actitud engreída de la beta, sintió el cabello de esta en su cara y lo tomo entre su mano para tirarla al suelo, se subió encima de esta y la inmobilizo con sus brazos, no sabía de dónde había sacado tal fuerza, pero tampoco le importaba.

-  Eres una escoria, porque haces esto sabes que Taehyung es mi alfa, porque lo haces.

-  ¡Te odio sabes! ¡Te detesto! ¡Taehyung es mío! ¡Recuerda esto Jeon! ¡Taehyung jamás te volverá a recordar!- Jungkook no lloro, a pesar de que aquellas palabras lo destruyeron por dentro, no se dejó ver débil- Escúchame omega, si no te alejas de Taehyung tu hijo adoptado y el que llevas en el vientre sufrirán las consecuencias, puede que tú familia esté en la cárcel, pero tengo más contactos y te juró que si te veo cerca de Taehyung los mató.