Dame tu mano

Capítulo 3: ¿Enfermera?

-¿Perdona?- estaba perpleja, pero este tío donde se creía que estaba ¿en un hotel?
- Que me des una pastilla-repitió más alto.
Pero, ¿Quién se cree que soy, una camarera, su chacha?
La puerta se abrió dejando pasar a un doctor Taylor muy sonriente y a un doctor Martin no tanto.
-Vaya, vaya... parece que la bella durmiente despertó- comentó Caleb con el buen humor que le caracteriza
-Quiero cambiar de enfermera, esta es muy borde y no me trae una aspirina.-bufo molesto el paciente.
-¡¿Enfermera?!- grite. Aunque fuese una enfermera no tenía el derecho de hablarme ni tratarme así, su trabajo es tan complicado como el mío y no debería menospreciarse su trabajo.
-¿Veis? Juraría que tiene la regla, o que hace mucho que no folla.-soltó James. Ya no me parecía tan guapo, ahora lo veía bastante imbécil.
-Es siempre así-se limitó a contestar Adam.
James rió y yo puse mi mayor cara de odio a Adam. ¿De qué coño va?
-Para tu información, soy médica y la encargada de que vuelvas a sentir tus piernas y caminar, pero si no te interesa, no pasa nada, seguro que la vida en silla de ruedas es maravillosa.-dije cínica haciendo el amago de irme.
-La Dra. Halliwell es muy buena en su trabajo, ha conseguido cosas que el resto veía imposible. Te recomiendo no enfadarla-Caleb precia ponerse serio al decir estas palabras.- Cuando tengas la valoración inicial, avísame Gianna.
Ambos doctores salieron de la estancia, no sin antes recibir una mirada que no logré descifrar de parte de Adam.
Por lo menos, parecía que el señor "oye nena" se había callado y empecé con mi valoración.
Le pinché los dedos de los pies, pero no había respuesta, tampoco en las piernas.
-¿Notas algo?- pregunté esperanzada
-Absolutamente nada.-a estas alturas creo que James ya era consciente de la gravedad del asunto.
-Tranquilo, aún falta que baje la inflamación, después de eso igual tenemos más suerte.
Apunte que le dieran inflamatorios cada 8 horas y avise a Caleb de los resultados. A las 20.00 hr nos reuniremos a ver que hacíamos.

Mientras tanto, llegó otro paciente para mí, una pobre anciana que se había caído y roto la cadera, operaremos mañana a primera hora. Y sin darme cuenta, ya era la hora de la reunión.
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Este capítulo es más cortito, como os gustan más ¿largos o cortos?