¿De qué tienes ganas? (Jungkook)

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No quiero, pero sin querer lo estoy haciendo

Narra Beata

Estaba inquieta y es por él, empezaba a quererlo, a sentir por ese estúpido chico, pensé que eso no pasaría, no después de Charlie. Ese nombre era mi marca y mi único amor, también al que odio con todo el asco de mi cuerpo, mentí al decir que nunca había sentido... Algo serio por alguien. Mateo solo fue mi novio por un par de años, o mejor dicho la compañía que necesitaba para mis descargas.

El amor no es habitual en mí y para ser sincera, me asusta Jungkook, él es bueno, podría hacer un listado de los malos hombres con los que me acosté, no se igualan a él. 

Molly– Deberías dejar de estar tan estática.– Tirada comiendo galletas.

Beata– Y tú deberías decirme qué sucedió con el cambio de sexo, hace meses que no te veo.

Molly– No me lo hice nena, sigo siendo un chico con ropa de reina.– Rió– Pero con el maquillaje no se dan cuenta.

Beata– Tu voz es gruesa, hablas y la cagas.– Le di una pitada al cigarro.

Molly– Algún día cambiará, no tengo prisa por eso, además, hay chicos que mueren por esta voz.

Beata– ¿Por qué no te hiciste la cirugía? Vienes años planeándola.

Molly– No quiero que me golpees.

Beata– Habla.– Fruncí el ceño.

Molly– Bien, tenía el dinero, pero conocí a un chico y terminé gastando parte en él, ahora debo juntar más y mi hermana no me pudo acompañar, ¿Qué iba a hacer? Sola en un hospital extranjero, no, querida amiga.

Beata– Perdón por no acompañarte.

Molly– Siempre estuviste para mí, fuiste mi empuje cuando más te necesité, no te culpo por no estar.– Sonreí con los labios pegados– Ahora tú, explica por qué estás tan muerta viviente.

Beata– Me senté a su lado con el cenicero y el cigarro– Un chico me violó.

Molly– ¡¿Qué?! ¿Quién es? Lo mataré, clavaré un tenedor en sus bolas.

Beata– Tranquila, mujer, fue mi culpa porque yo busqué que pasara eso. 

Molly– ¿Entonces?– Se tranquilizó, ya me conoce.

Beata– Es bueno, no un psicópata, su historia de vida es tan pésima como la mía, bueno, no tanto...– Exhalé el humo– Seguí saliendo con él y creo que...– Me costaba decirlo– Creo que lo estoy queriendo, él se ofreció acompañarme a casa de mi madre en noviembre.

Molly– Me miró seria– ¿Irás a casa de la señora Dever?– Preocupada.

Beata– Hace cinco años que no la veo, bien, la crucé en un viaje una vez pero no es lo mismo.

Molly– Sé lo difícil que es para ti ir, ¿Estás segura?

Beata– Asentí– Siento que si él va, estaré bien, nada me lastimará.

Molly– Tomó mi mano– Tu problema más grande se encuentra allá y no sé qué tan mal te haga si vas, amiga, y eso me aterra.

Beata– La miré a los ojos– Si exploto lo sabrás, serás la primera en saber.