Capítulo 28

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Louis

Lunes 28 de Enero, 2011.

Harry me vuelve loco, en todos los sentidos. Hemos peleado más que antes pero cuando estamos bien, son sin duda los mejores momentos de mi vida.
Desde la última vez que lo ví muchas cosas mejoraron, pero muchas otras empeoraron.

Su cumpleaños es el viernes, pero ese mismo día es mi puta boda.

Traté de convencer a mi padre de cambiar la fecha pero es imposible, ya está todo arreglado.

También he tratado de convencer a Harry de que hagamos algo para celebrar su cumpleaños aunque sea uno o dos días después pero se niega completamente, dice que no le importa su cumpleaños y que solo es un día más, pero yo le he dicho que está loco y que su cumpleaños merece ser celebrado. Yo sé que no le interesa por la boda, pero también sé que si le doy por su lado a qué no hagamos absolutamente nada va a sentirse mal porque no me esforcé en convencerlo y eso en definitiva me frustra.

Aún no puedo decirle que hay un noventa y nueve porciento de probabilidad de que sea un príncipe, necesito algo más para confirmarlo. Precisamente hoy estaremos en Cheshire por una elegante cena a la que nos invitó el rey, supuestamente porque fue muy bueno el trato que cerramos con su reino. Me encantaría poder llevar a Harry conmigo, pero está tan bipolar últimamente que casi puedo asegurar que aunque pudiera hacerlo no iría.

–¿Majestad, está listo? —me pregunta la princesa detrás de la puerta del baño del avión— El rey nos está esperando en el auto.
–Sí, ya voy, gracias —mojo mi cara y salgo ignorando su presencia.

El aire fresco de este lugar me hace pensar en Harry. ¿Extrañará su ciudad o la recordará al menos?

El camino al palacio del príncipe parece no tener fin, hasta que veo por la ventanilla cómo se abren las enormes puertas de éste.

Apenas se detiene el auto y mi padre baja, la princesa baja, Liam baja, Zayn baja, mientras me quedo en el auto, pensando en Harry, y por un instante me viene mi madre a la mente, no sé porque.

–Louis, anda —me llama Zayn— Te esperan adentro.

Bajo del auto sin decir nada y me adentro en el palacio mientras mi amigo me sigue.
Me siento algo extraño hoy.

–¡Príncipe Louis, que gusto verlo!
–Príncipe Terrence —respondo con una sonrisa— También me da gusto verlo.
–Permítame presentarle a mi padre, Majestad.

Ambos caminamos al gran salón, en dónde se encuentran todos.

¿Pero qué mierda? Entraron solo unos segundos antes que yo.

–¡Príncipe Louis! —saluda el rey Desmond— ¡Es un placer poder conocerlo al fin! Su padre ha mencionado maravillas de usted.

El hombre de 54 años aproximadamente, canoso y de ojos verdes, me recibe sonriente pero con la mirada algo perdida, mi padre y la princesa están sentados en la enorme mesa en la que supongo que vamos a cenar y Liam, Zayn y el chico rubio que acompañó al príncipe la última vez nos observan desde una distancia considerable.

Algo no me cuadra, algo está sucediendo aquí.

–El placer es mío, Su Alteza.
–Pasemos a cenar, por favor —ofrece amable— Quiero que me cuenten todo acerca de Doncaster. ¿Cómo es?

Justo como lo ordena, pasamos a la mesa. Al mirar el reloj puedo darme cuenta de que son las 5:24p.m. No sé en qué momento se hizo tan tarde.

Todos hablan de cosas que habla la realeza en este tipo de cenas. Es extremadamente aburrida esta mierda.

Always In My Heart  ≈Yours Sincerely, Louis≈ [1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora