Capítulo 16

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Pov Miley

Desde que dejamos Colombia, mi vida ha dado un giro de ciento ochenta grados, pase de temerle al amor a estar localmente enamorada de un hombre al que apenas conozco; sé que no tenía una razón lógica para temer enamorarme pero en mi defensa diré que pase mi adolescencia tratando con chicas que siempre estaban con el corazón roto, y renegando de los hombres; eso hizo que les tomara recelo y evitará tener algún tipo de contacto físico más allá que el de una amistad.

Ahora me encuentro acostada en la cama recordando sus besos y su manera tan tierna de tratarme, aunque me encanta cuando se pone posesivo conmigo.

Dylan, ha llegado en el momento indicado para enseñarme lo que es el amor, fue algo que no me lo esperaba, trate de negarme a mi misma lo que sentía, trate de convencerme que era algo superficial, pero no fue así, su amor logro calarme tan hondo que ahora no me imagino en este mundo si él no está el.

Doy vueltas en la cama sin poder dormir, Dylan no ha llegado y son más de las once, me levanto de la cama y me pongo un albornoz para ir a la habitación en la que duerme mi hermana, camino en dirección a la puerta y Dylan la abre cuando estoy apunto de tomar la perilla, pego un grito ahogado y me sobresalto por la sorpresa.

-Un día de estos me matarás de un susto -Le digo poniéndome una mano en el pecho.

Él sonríe, camino de vuelta y me siento en una orilla de la cama, él se me acerca quedando a unos centímetros de mi.

-Lo siento mi bella dama, pero preferiría comerte a besos.

Me encanta lo que me dice pero yo no sé lo demuestro, me cruzo de brazos, él sonríe, acorta la distancia y se inclina para darme un beso.

-¿Pensabas salir? -Pregunta mirándome la boca.

-No podía dormir, y quería ver a mi hermana -Él acaricia mi rostro.

-Debe estar dormida, y en este momento Dereck está en su habitación, no creo que sea prudente -Dice desaprobado mi idea y yo asiento disfrutando de su caricia -Descansa, iré a ducharme -Camina en dirección al baño mientras se desabrocha la camisa.

Me quedo sentada mirándolo desaparecer por esa puerta, y siento la ducha correr, me levanto de la cama, tengo calor aunque la noche está fría, me quito el albornoz y me acercó al ventanal, abriéndolo un poco, la brisa de la noche me mueve el cabello despeinándolo.

No sé cuánto tiempo estuve observando a la luna brillar en lo alto; me sobresalto al sentir la respiración de Dylan en mi cuello, y él me rodea la cintura con sus brazos.

-Pensé que te irías a dormir -Dice con voz ronca.

-No tengo sueño -Respondo en un susurro.

Giro en sus brazos hasta quedar de frente, le miró el cuerpo brevemente y solo tiene una toalla amarrada a la cintura, subo la vista a sus ojos, tiene las pupilas dilatadas, y me mira la boca como si quisiera comerla; yo suelto un suspiro y así lo hace, me toma de la nuca y me besa con pasión, yo inmediatamente llevo mis manos a su espalda y lo atraigo a mí...

...Mete sus manos por debajo de mi short de pijama y me levanta, subo las piernas y las enredo en su cadera, camina conmigo y me recuesta a la pared más cercana, pegándose totalmente a mí cuerpo.

Jadeó por falta de aire y él se separa un poco.

-Miley pídeme que me detenga y lo haré, no quiero presionarte -Me dice con la respiración acelerada.

-No quiero que te detengas, quiero hacer esto, deseo que me hagas tuya -Le digo mirándolo a los ojos.

-Has sido mía desde que tú corazón empezó a latir.

SIEMPRE HAS SIDO MÍA (Saga Gemel@s) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora