¿𝗦𝗮𝗹𝘃𝗮𝗱𝗮? - 𝗣.𝗠

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 37

Me empecé a despertar, me dolía la cabeza y me costaba abrir los ojos, creo que estaba atada a una silla, entonces alguien empezó a hablar.

P: Venga princesa, abre tus ojitos.  

Payton...

Cuando abrí los ojos me encontré a Payton magullado y en frente mía atado igual que yo.

Yo: Payton -susurré.

Mi cuerpo se relajó, estaba conmigo.

P: Dime princesa.  

Yo: ¿Dónde estamos? ¿Por qué estas así?

P: Princesa no sé donde estamos, solo se que Noah es quien ha hecho todo esto y estoy magullado por forcejear demasiado.

Yo: Noah es el chico con el que soñé...

P: Él era un antiguo socio mío, hizo las cosas mal y perdió su dinero, me echó a mi la culpa y me dijo que me haría daño con lo mas preciado para mí, y lo eres tú.

Una lagrima resbaló por mi mejilla.

P: No llores mi vida, saldremos aquí.

Yo: Me dijo que me separaría de ti y que seria suya.

P: Eso no va a ser así, algo se nos ocurrirá.

Entonces una puerta se abrió dejando ver a Noah, el se acerco a mí y me beso, yo me intente apartar pero puso su mano en mi nuca.

N: O me besas o acabas muy dolida.  

P. Princesa bésale, no quiero que te haga daño.

Yo cerré los ojos muy fuerte y le seguí el beso, segundos después el se separó.

P: Noah, que quieres de mí o de Mía.  

N: De Mía no quiero nada, es una puta más.

P: ¡Cierra la boca!

Noah no lo pensó dos veces y le pegó una cachetada.

Yo: ¡No le pegues!

N: ¡Cállate maldita puta!

Yo: ¡NO! ¡A mi nadie me calla!

Entonces él me pegó una cachetada a mí.

P: Eres un cobarde pegando a una mujer.  

N: ¡Callaros los dos! Payton de ti, quiero la parte que me debes o si no, tu putita pagara las consecuencias.

Él nos desató, tiro de nuestras sillas para caer al suelo y Payton corrió a abrazarme.  

N: Que aproveche -acercándonos unas bandejas con comida.  

Él cerró la puerta muy fuerte y yo abracé a Payton.  

P: Princesa necesitamos coger fuerzas, vamos a comer.  

Yo asentí y me acerqué a mi bandeja, empezamos a comer y al terminar vimos que había una pequeña cama al fondo de la sala, hacia frio y la sala era un poco oscura, por lo que me sentía incómoda.

P: Princesa...¿te duele la mejilla?

Yo: Un poco, ¿y a ti?

P: Otro poco, si el te besa tu síguele el beso, no me pondré celoso, solo no quiero que te haga nada.

Yo. No me siento bien haciéndolo...

P: Lo sé cariño, pero créeme que te sentirías peor si te hiciese algo.

Yo: Tienes razon...

P: Vamos a dormir.  

Yo ayudé a Payton a levantarse y a tumbarse en la cama.  

Yo: Para no hacerte daño dormiré en las sillas.

P: No princesa, necesitas descansar bien, ven conmigo.  

Yo: ¿De verdad que no te voy a hacer daño?

P: Te lo prometo mi vida, ven.

Yo me tumbé a su lado y le abracé y él a mí.  

Yo: Que descanses Payton.

P: Igualmente mi princesita.

✵✵✵

Al día siguiente desperté, no se que hora sería, pues no había ventanas, pero con la poca luz que había pude comprobar que Payton no estaba.  

Acababa de poner un pie en el suelo cuando unos hombres entraron de un portazo, me cogieron cada uno de un brazo y me elevaron, subimos a lo que seria la casa y llegamos a un despacho, allí estaban Payton y Noah, los hombres me bajaron en la entrada del despacho y se fueron cerrando la puerta.

N: Ven bonita.  

Yo me acerqué hasta la mesa, y me puse al lado de Payton que estaba sentado, abrazó mis caderas y me besó el abdomen.  

N: Ven, siéntate aquí -dando palmadas en sus piernas.  

Yo negué, pero noté como Payton quitaba sus brazos de mi cadera y me empujaba levemente para ir hacia Noah, me senté casi en el borde de sus rodillas, no quería sentir nada...raro, él tomó mi mentón e hizo que le mirara.

N: La verdad es que eres muy pero que muy bonita...

Si esas palabras no salían de la boca de Payton no me agradaban, él se acerco a mí y acortó la distancia que había entre nosotros con un beso, al principio no lo seguí, pero entonces puso sus manos en mi cintura y las apretó, como obligándome a seguirle el beso, como la ultima vez, le seguí el beso apretando muchos los ojos, ese hombre me repugnaba.

Por fin se separó del beso, y yo limpié mi boca con mi mano, no me importaba que viera.

N: Moormeier, o me das dos millones, o tu putita será mía.  

P: Claro que si, te daré esos 2 millones, pero déjanos ir, al menos a Mía.

N: Perfecto entonces. 

Él llamó a los dos hombres que me habrían traído anteriormente y ellos vinieron con dos pañuelos.

Yo: ¿Por qué nos vais a dormir?

N: Bonita -rozando mi mejilla- no queremos que sepáis donde esta esta casa, o si no, llamareis a la policía y vendrán a por mi, pero no te preocupes, yo saldré y hare lo que sea para vengarme, pero...¿tu quieres eso? -yo negué- muy bien bonita -me dio un pico.

Yo me levanté de sus piernas, pues él me había empujado un poco para que me levantara y rápidamente uno de los hombre me agarró.

P: ¿Podéis ser menos salvajes? -pregunto molesto.  

A él también le cogieron y le pusieron el pañuelo en la boca, él me miro con los ojos cansados, el cloroformo le estaba haciendo efecto, entonces me lo pusieron a mi y caí rendida.

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Hola holaa....dios...otra vez intriga...

[𝗉𝖺𝗒𝗑𝗅𝗈𝗏e©]