¿𝗦𝗮𝗹𝘃𝗮𝗱𝗮? - 𝗣.𝗠

𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 39

Al día siguiente me desperté por unos ruidos que venían de la cocina, me levante y vi a Payton haciendo pancakes, con su pelo revoltoso de por la mañana, pero su mirada no era tan profunda como ayer, en cambio era algo triste, supongo que estaría arrepentido.

Yo: Buenos días -entrando a la cocina.

P: Buenos días princesa -aparto la mirada de los pancakes para mirarme con una sonrisa- estoy haciendo un desayuno especial, ¿te apetecen unos pancakes?

Yo: Si -dije sacando zumo de la nevera.

Cuando Payton terminó de cocinar se sentó en la mesa de la cocina en frente de mi.

P: ¿Hoy podemos hablar?

Yo dejé mi tenedor en el plato y le mire.

Yo: Payton yo no tengo nada de que hablar, sabes que confío ciegamente en tí, y si te dejo alguna vez tiene que ser por algo muy grande, con unas rosas baratas me basta para entender que me quieres, y yo con un beso te puedo demostrar que también te quiero, y los dos tan contentos, pero tus has organizado un secuestro para que confie más en ti, sabias lo que paso en mi pesadilla y lo hiciste real, y no estoy enfadada, estoy decepcionada, porque no confías en mi amor hacia tí.

Payton bajó su mirada, pero pude ver como una lagrima resbalaba por su mejilla, yo me incline para secarla y levante su mentón.  

Yo: Ya no me apetece hablar mas sobre esto, ahora desayunamos.

Él me seguía mirando triste.

Yo: ¿Pasa algo?

P: Si que confió en ti -murmuró.

Yo: Ayer parecía que no.  

P: Te lo dije ayer, tengo miedo de que me dejes.  

Yo: ¿Y yo que te he dicho de dejarte?

P: Pues que lo harías si pasaba algo grande.

Yo puse mi mano encima de la suya y él la apretó

P: ¿Pero y si pasa algo grande?

Ahí yo me quede callada...no sabia que responder a eso.

P: Mia, ¿si pasa algo grande me dejarías? -otra lagrima resbaló por su mejilla.  

Yo seguía sin saber que responder, él se levantó de su sitio, se puso de rodillas al lado mía y giro mi silla para que me quedase enfrente de él.

P: Esto ha sido algo muy pero que muy grande, joder ¡te he hecho pensar que te habían secuestrado por segunda vez! ¡¡es grandísimo!! 

Dicho esto se echó a llorar apoyando su cara y brazos en mis piernas, yo acaricie su pelo...no le podía dejar, si, era grande lo que había hecho, pero no podía, de verdad que no.

P: No me dejes por favor princesa -decía entre sollozos- no me dejes, por favor.  

Yo: No puedo dejarte -solté- no puedo -se resbaló una lagrima por mi mejilla.  

Él se levantó, me cogió y me elevó, haciendo que enrollara mis piernas en su cintura y empezó a llorar en mi hombro.  

Yo: Por favor mi amor deja de llorar.  

Noté como se relajo al escuchar "mi amor".

Yo: No me veo capaz de dejarte, simplemente no puedo -dije algo agobiada.

Él separó su cara de cuello y me echó un poco para atrás para poder verme, toda su cara estaba roja, incluidos su ojos, yo roce mi mano por sus mejillas y al sentir el tacto cerro los ojos. Nos quedamos un rato en silencio, pero entonces Payton empezó a hablar.