𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 46

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Yo: No no me vas a perder, la próxima vez te dejare hablar -susurré pegada a su cuello.

P: Muy bien princesa, lo primero es la comunicación, ¿quieres decirle a Will que todo esta bien? - yo asentí- bien, toma mi móvil mi vida.  

Yo llamé a Will, le conté que todo estaba bien y me dijo que si pasaba algo no dudara en llamarle.

P: Te amo mi princesita -dijo secando algunas lagrimas que aun tenia en mis mejillas- te amo mucho mucho.

Yo: Yo también bebé.

P: ¿Cuánto?

Yo: De aquí a el Sol.

P: Eso es mucho -dijo sonriendo.

Yo: Si -sonreí y le besé- se que solo han sido tres días, pero echaba de menos tus mimos y tus palabras bonitas, por una pantalla no es igual.

P: Lo se princesa, ven, vamos a limpiarte esas lágrimas.

Yo me agarré a él como un koala, me llevó al baño, me sentó en el lavamanos, mojo su mano y la paso por mi cara, y me secó con una toalla.

P: Más guapa aun -dejando de secar mi cara.  

Yo estoy segura de que me sonroje.

P: ¿Qué te parece si vamos a esa cafetería que me dijiste?

Yo: ¡Sii!

Después de dar una vuelta por Nueva York e ir a esa cafetería tan bonita volvimos a casa y a Payton le llamaron por teléfono, al colgar me miró con una cara triste.

Yo: ¿Pasa algo bebé?

P: Mi vida...ha surgido algo en la empresa y tengo que ir.

Yo: Oh...no pasa nada, ¿vendrás tarde?

P: No te preocupes, tardos dos horas máximo -me acercó a él por la cintura- siento mucho no estar estos días contigo princesa -susurró.

Yo le abracé.

Yo: Está bien, es tu trabajo -dije contra su pecho .

P: ¿Si ves que tardo mucho, no me esperes vale? Quiero que descanses -besó mi frente.

Yo: No prometo nada -solté una risita y él también.  

Él me abrazó más fuerte.  

P: No me quiero ir.  

Yo: Venga bebé, tienes que ir.  

Él hizo un puchero, le besé y le di la mano hasta la puerta.

P: Adiós princesa -me besó- voy a estar todo el rato pensando en ti -me volvió a besar.

Yo: Adiós bebé, yo también.  

Él se despedía con la mano como siempre, hasta llegar al final del pasillo.

Después de un rato me puse a leer en nuestra habitación, hasta que oí unos golpes en la puerta, pensé que era Payton, así que me asome, pero vi a dos hombre con la cara tapada.

X: Coge todo lo de valor, este hombre esta forrado.

Yo no me enfrentaría a ellos, tenían pinta de peligrosos, así que me escondí en una parte del armario en la que no me verían.

Se oían muchos golpes y como tiraban algunas cosas, yo tenía miedo de que me encontraran, mi respiración se empezaba a acelerar, y aún mas cuando oí como subían las escaleras, yo me asegure de que no me vieran, y no lo harían, tape mi boca para que no oyeran mi respiración.  

Y mi corazón se paró cuando oí como entraban al armario.  

X: Joyas de mujer, con esto si que vamos  conseguir dinero.  

No...las joyas que Payton me había regalado...las tenía mucho aprecio, eran preciosas y no puedo hacer nada para que eviten quitarmelas...

Los hombres se fueron de la habitación, oí como bajaban las escaleras y se oían más golpes, de repente, silencio, yo no quise salir de mi escondite, tenía miedo.  

Estaba teniendo un leve ataque de ansiedad, el miedo y la frustración de no poder hacer nada me pudieron y rompí a llorar.

No se cuanto tiempo paso, pero oí de nuevo la puerta.  

P: Princesa ya he llega- ¡¡QUÉ HA PASADO AQUI!

Por fin había llegado.  

P: ¡Princesa dime que estás aquí! ¡Mía!

Yo salí lentamente de mi escondite, abrazada a mi misma y bajé las escaleras, cuando Payton me vio corrió hacia mi y me abrazó.  

P: Dios mío pensé que te había pasado algo.  

Yo seguía temblando.  

Yo: Lo siento mucho -sollocé- no he podido hacer nada.

Él acarició mis mejillas con sus pulgares para calmarme.  

P: Tranquila princesa, ¿me puedes explicar qué ha pasado?

Yo le conté todo

Yo: Y se han llevado las joyas tan bonitas que me regalaste -dije apenada- seguro que te gastaste mucho en ellas y no he podido evitar que se las llevaran, lo siento mucho -agaché la cabeza.

Él tomó mi mentón.  

P: Princesa, tranquila, mírame -subí la mirada- muy bien, no te preocupes por las joyas, has hecho muy bien escondiéndote, podrían haberte hecho mucho daño, y eso no me hubiera gustado nada, ahora llamaré a la policía, y tu les contaras todo, ¿vale mi amor?

Yo asentí.  

P: Ya ha pasado todo cariño, ha sido un susto, pero ya estoy aquí contigo -yo le abracé fuerte- pondré toda la seguridad que sea necesaria, no quiero que tengas miedo de vivir aquí.

Mi respiración se relajó al oír los latidos del corazón de Payton y él mientras acariciaba mi pelo y mi espalda llamó a la policía.

Al venir, me hicieron unas preguntas. 

X: Muy bien, según nos has descrito a esos hombres nos hacemos idea de quienes son, ya han robado a 3 empresarios importantes en esta ciudad, muy buenas noches. 

P: Buenas noches. 

Al irse el policía cenamos y nos fuimos a dormir, Payton me abrazó y yo puse mi cabeza en su pecho para oír su corazón.

Yo: Me relajan los latidos de tu corazón -susurré.

Él soltó una pequeña risa y yo sonreí.  

P: Tu a mi me relajas con mirarme, y no se como lo haces, eres la primera persona que lo consigue -sonrió- no te han hecho nada, ¿verdad?

Yo: No, se han llevado muchas cosas...que seguro costaban mucho dinero...

P: No te preocupes, no se han llevado mi tesoro mas preciado.

Yo: ¿Cuál?

P: Dirás ¿quién?  

Yo: ¿Quién? -pregunté confundida.

P: Tu -susurró muy cerca de mi oreja.

Yo me acerque a su cara y le besé y junte nuestras frentes.  

Yo: Te quiero.

P: Yo también princesa.

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Hola holaa, bueno bueno bueno....este capítulo creo que estuvo interesante

¿𝗦𝗮𝗹𝘃𝗮𝗱𝗮? - 𝗣.𝗠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora