Preocupación

5.4K 844 993
                                    

     Durante el lunes, Namjoon hizo su rutina de siempre dentro de la biblioteca mientras en su mente elaboraba una conversación muy madura y con seriedad a la vez que amable para que él y Seokjin pudieran expresar sus sentimientos y saber si ambos iban en la misma dirección, esto con el propósito por supuesto de no alargar la preocupación de Namjoon sobre si estaba ilusionándose para nada. Claro, en su mente esa conversación salió de diferentes maneras, algunas buenas otras algo trágicas y dramáticas, pero ninguna de esas ocurrió, ni cerca.

Seokjin no llegó el lunes, ni el martes que Namjoon se sentía todavía más preparado. El chico de lentes tenía la nota lista en su bolsillo y su vista yendo recurrentemente a la puerta, sabía que no era obligatorio que Seokjin fuera todos los días a la biblioteca pero ya se había acostumbrado a verlo seguido desde semanas atrás. Eso sólo hacía más difícil la espera.

Si ya estaba nervioso, el miércoles se le sumó una gran preocupación cuando salió de la biblioteca y no le vio. Camino a su hogar por las calles iluminadas por algunos rayos del sol que estaba cercano a ocultarse, y pocos faroles en las esquinas de las cuadras, Namjoon le contó a Tyrone lo que le preocupaba. Tal vez Seokjin ya no quería ir nunca más a la biblioteca, ¿Para qué? Si el chico con el que estuvo el sábado se veía mayor, seguramente con muchos más conocimientos que los que tenía el de lentes. Ya no tenía sentido ir a la biblioteca.

Tyrone le pateó y le regañó por pensar así, y aunque no le dijo que probablemente estuviera imaginando cosas que ni al caso, sí le aconsejó que dejará de preocuparse tanto por ello. Aseguró que Seokjin iría al día siguiente y que dejará de angustiarse, si ese chico era algo de Jin, seguramente sería sincero con Namjoon y le diría en cuanto pudiera. Eso no tranquilizó al de lentes, mucho menos cuando el jueves tampoco fue Seokjin a la biblioteca.

Y en definitiva, aunque su primo le advirtió, Jackson tampoco le ayudó a distraerse. Entre él y Tyrone se pusieron a discutir sobre Seokjin, ninguno lo conocía tan bien, pero el chino alegaba que quizá estaba jugando con el corazoncito de Namjoon mientras Tyrone intentaba defenderle, pero no servía de mucho, no conocía al chico así que terminó callándose y oyendo junto a Namjoon las palabras de Jackson.

—Es un idiota, ¿Dices que sabes dónde vive? Yo que tu iba y le aventaba una piedra a la ventana.

—Y se supone que yo soy el vándalo, según tu tía. —rodó los ojos Tyrone, decidiendo dejar de prestarle atención.

—No haré eso.

Namjoon se negaba a cometer un acto delictivo, pero Jackson no se detuvo —Yo digo que sí mañana el chico no va a la biblioteca, ni el viernes, no te detengas ni te pongas triste. Si tu corazón se daño, tú puedes dañarle la ventana.

—Lamentable tu caso. —siguió diciendo en voz baja Tyrone.

—No, porque ese tal Seokjin sabía lo que siente Namjoon, que no se haga el tonto, él lo sabía y si se aprovechó de eso para jugar un rato, entonces no merece ni un poco de misericordia. Si no te atreves pásame la dirección y yo voy Namjoon.

—Yo... mejor me voy, quiero irme solo —se levantó sintiéndose más abrumado que nunca, ignorando los llamados de Jackson y Tyrone—, en serio quiero estar solo.

La idea de que Seokjin se divirtiera con la situación era simplemente dura de imaginar. Después de ayudarle a estudiar, de conversar, de reír y salir a comer, incluso correr juntos por sus vidas al estar huyendo del chico que quería golpear a Namjoon. Después de eso no podía Seokjin simplemente haberse sentido aburrido y dejarle de lado.

En su hogar la misma escena de hace días lo recibió, su madre peleando con Geongmin mientras su padre no estaba en casa, no le extrañó y se encerró en su cuarto sin dejar de pensar.

Cosas de Novios - NamjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora