Pagando por los cambios

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     Namjoon no estaba seguro de cómo sentirse.

El día anterior fue todo un caso. Pasó de estar besando a Seokjin, a correr a los baños apenas acabó la función, encontrándose con él y su novio tenían los labios hinchados, así como también se encontraban con la ropa y el cabello un poco desacomodados. Dedicaron al menos cinco minutos a tratar de ocultar la evidencia. Después de encontrarse con Jackson sentado en el lobby del cinema, esperando que les reclamara, se sorprendieron cuando solo les apuro para volver a casa. No dijo nada más. Seokjin se fue en su bicicleta, y a él lo llevaron hasta casa de su tía Iseul, yendo en el asiento trasero junto a Jackson mientras su padre conducía, el hombre confundido porque en esa ocasión ambos iban callados mirando por sus respectivas ventanas, uno sonriendo a la nada más que el otro. Él tampoco dijo nada. Lo dejaron empezada la noche, asegurándose de que entrara antes de retirarse, sin saber que el chico llegó y se recargó en la puerta, todavía sonriendo porque el día había sido tan maravilloso. La felicidad duró hasta que llegó su tía a recibirlo. La notó nerviosa, preguntando por dónde había estado y qué había estado haciendo, fue sincero en parte pero también omitió detalles y nombres, aunque eso no pareció importar mucho porque le dio la sensación de que ella no estaba escuchando.

Apenas terminó de hablar ella le dijo:

—Ve a acomodar tus cosas, Namjoon... tus padres vendrán mañana temprano por ti.

Esas palabras se sintieron como un golpe que le regresó al lado obscuro en su vida, un recordatorio de que no podía quedarse junto a Seokjin y ser feliz. Le preguntó a ella, también a Tyrone por sí él había escuchado algo más estando en casa pero ninguno de los dos pudo darle muchos detalles, y es que al parecer su padre fue quien llamó, manteniendo sus respuestas cortas. Sólo sabían que pasarían poco antes del medio día por él, y que irían directo a casa. Eso fue más que suficiente para generarle ansiedad, el pobre se quejaba mucho en voz baja, y fue aún más torpe moviéndose y tomando cosas, la mayoría resbalándose de sus manos. Luego de despedirse para irse a dormir su tía le abrazó y le aseguró que todo iba a salir bien. Apenas y pudo dormir, aunque Tyrone se la pasó abrazándolo toda la noche.

Su primer pensamiento esa mañana cuando abrió los ojos fue que ojalá no lo hubiera hecho.

—Mis tíos no dijeron nada, tratemos de ser positivos Nammie, seguro quieren hablar contigo personalmente y disculparse. Este tiempo lejos de ti les habrá hecho darse cuenta de lo equivocados que estaban.

Todas esas semanas pasadas, nunca le hablaron por teléfono, sólo llamaban para preguntar qué estaba haciendo, su tía respondiendo como si diera un reporte semanal de conducta.

Ni pudo comer. Esperó sentado en la sala, con su mochila al lado y Tyrone del otro, tratando de distraerlo contándole de unos planes que estaba haciendo con amigos de su instituto, irían a una montaña el siguiente fin y él estaba más que invitado. Le escuchó, preguntándose cómo era posible que su primo con 15 años fuera más independiente y libre que él con los 18 casi cumplidos se sentía tan atado, tan sumiso... tan hundido. Cuando llegó su padre sintió como si tuviera una correa en el cuello que jaló asfixiándole, pero haciendo que le siguiera sin que pudiera poner resistencia. Tyrone le abrazó con fuerza, recordándole que podía volver cuando quisiera, su tía le dio otro abrazo y le agradeció por cuidar de sus plantas, su tío siguió permaneciendo un poco distante y sólo le apretó el hombro, Giselle no se quedó atrás y fue a abrazarle, aunque tanto su padre como su tío quisieron evitarlo. Iseul fue firme y pidió que los dejaran, el chico dando unas palmaditas en la espalda de la niña mientras ella le hacía prometer que iría otro día a jugar.

—Ya suéltala Namjoon, y vámonos.

Su tío la cargó alejándola de él, mientras Namjoon se quedaba quieto un momento antes de dedicarles una reverencia a la familia de su tía —Gracias por cuidar de mí.

Cosas de Novios - NamjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora