Cosas de Novios - Namjin

Hay algo ahí

    A pasos apresurados y todavía colocándose la mochila de la escuela sobre sus hombros, Namjoon salió por la puerta de la biblioteca encontrándose solamente con el guardia. Este le sonrió amable y le preguntó si acaso ya se retiraba tan temprano, el joven no pudo responderle bien, no mientras su cabeza volteaba de un lado a otro buscando a Seokjin. No estaba, ni siquiera sentado en las escaleras.

Pudo sentir su corazón estrujándose.

—E-el chico que salió antes... ¿Dijo a dónde iba? —preguntó con angustia, un terrible presentimiento abriéndose paso en él y haciéndole creer que su nota había terminado de sellar su sentencia.

El hombre se rió al tiempo que un flash golpeaba el perfil de Namjoon, sobresaltado se giró encontrándose con Seokjin a unos pasos de distancia, una columna detrás de él donde seguramente se había ocultado momentos antes de saltar con la cámara ya apuntándole.

Jin también se rió, claramente avergonzado mientras sus manos sostenían una cámara un poco grande, completamente negra y con un gran rectángulo del que salía la luz del flash. El chico de 16 pudo haberse dejado caer al suelo de rodillas luego de relajarse, ahí estaba Seokjin sonriéndole, advirtiendo de la su cara que aún mostraba sorpresa.

—Ay lo siento, Namjoon, ¿Te molestó? Yo le mostré la cámara al guardia y le pregunté si creía que tomarte una foto de sorpresa estaría bien, y dijo que sí, sino fue así lo siento. Creí que sería divertido, si estás molesto prometo que cuando la revele te la daré para que hagas lo que quieras con ella. Aunque, uhm, sinceramente, quería tomarte la foto porque no tengo fotografías tuyas y me gusta tomar fotos.

Nuevamente Seokjin hablaba mucho, con el tiempo que llevaban conociéndose Nam sabía que eso era signo de que se encontraba nervioso. Se decidió enseguida por sonreírle para brindarle tranquilidad, no le importaba en absoluto la fotografía, no podía importarle menos sabiendo que ahí estaba Seokjin frente a él —Está bien, pu-puedes quedártela. Y puedes tomar más hyung, sólo avísame.

—¿En serio? —imposible negarse luego de ver cómo creció la sonrisa en Seokjin y sus ojos brillaron de emoción— Estaba tan asustado, ay ¡Gracias! —no sólo le dijo al chico, también al guardia del que se despidieron nuevamente, Jin con más entusiasmo que Nam. Empezaron a descender por las escaleras ahora con Seokjin diciendo— Me preocupaba que te molestara, no soy de ir por ahí tomándole fotos de sorpresa a quien sea ¿Sabes? Y luego de que me di cuenta que en todos estos meses que hemos hablado no te he tomado ni una fotografía decidí tomar algunas, pero mientras te distanciabas más me preguntaba cómo podía pedírtelo ¡Eso es otra cosa! Cada vez te alejabas más y yo no sabía qué hacer, tal vez es mi culpa porque hablo demasiado, sólo de mí, todo el tiempo. Ni siquiera me sé tú apellido, eso no está bien, ¿Cuál es?

Todavía no se acostumbraba a esa ráfaga de información que soltaba el castaño al ponerse nervioso, no sabía si empezar respondiendo esa última pregunta, explicarle por qué temía acercarse nuevamente o atender esa curiosidad que sentía y preguntar más sobre su gusto por las fotografías, detalle del que apenas se había enterado.

—Bueno, uhm, me llamo Kim Namjoon. —planeaba continuar pero Seokjin gritó frenando a unos escalones antes de llegar a la acera.

El mayor tenía sus ojos bien abiertos y una mano sobre su boca —¡¿Kim?! —podía ser algo tonto pero Seokjin se sentía como un verdadero bastardo tras apenas enterarse de ese detalle, era imposible que apenas se enterara que compartían apellido. Sabía que en sí no era algo completamente inesperado, ningún apellido era único y más de una ocasión se había topado con alguien que también llevaba como apellido "Kim", pero saber que convivió tanto tiempo y nunca le preguntó algo tan sencillo le hizo sentir como un desgraciado.