41. El novio de mi amiga.

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—Ahora no, Max —le dice Bea. Y nos alejamos hacia la salida. Max queda detrás de nosotros, y no insiste en hablar conmigo, lo cual agradezco.

El día que pensaba que iba a ser el mejor de mi vida, porque terminó un año más de escuela, pasó a ser el peor. Ver a tu novio besarse con otra persona y darte cuenta que tus compañeros tenían un plan para separarte de él. ¿Qué más puede pasar en este día? Espero que nada, no podría soportar otra mala noticia.

Seguimos nuestro camino hasta que llegamos a la casa de mi mejor amiga. Su madre no estaba lo cual es un alivio, ya que no tendría que explicarle nada de lo que ha pasado, ya que ella también es como una segunda madre para mí y me conoce igual o más que a su hija.

Subimos a su habitación y nos sentamos en su cama.

—¿Tienes ganas de hablar ahora? —me pregunta Bea. Yo niego con la cabeza— Iré a buscar un helado de chocolate que hay en el refrigerador, eso te ayudará a calmarte —y sale de la habitación.

Como me conoce mi amiga, siempre que una de las dos está triste, el helado de chocolate es la mejor solución.

Bea regresa con el bote de helado en las manos y con dos cucharas, mientras me sonríe. Le sonrío de vuelta lo mejor que puedo y hablo primero.

—Max me engañó —ella me mira sorprendida, demasiado diría yo.

—¿¡Qué!? ¿Con quién? —no digo nada— No me digas que es quién estoy pensando... —yo asiento.

—Con ella misma, Martha —le digo cabizbaja.

—Yo creía que era más inteligente. Se sabía que eso era lo que quería Martha con él.

—Y eso no es lo peor...

—¿Hay más? —abre la boca en una perfecta "o". Yo asiento.

—Escuché a Noah hablar con Martha y tenían un plan para separarnos a Max y a mí. Y creo que lo lograron... —juego con mis dedos.

—¡Todos los hombres son iguales! Y esa Martha... cuando la vea la voy a matar —dice mi amiga, alzando la voz y poniéndose de pie. Ya saben, mi amiga dramática...

—Tranquila. No puedes matarla. ¿Qué hago yo contigo en la cárcel? —le digo haciendo puchero. Ella me sonríe.

—Bueno, no lo haré solo porque me lo pides tú —yo le sonrío. Amo a mi mejor amiga, es quién me sube el ánimo hasta en los peores momentos— ¿Y qué harás con todo esto?

—No lo sé. Lo bueno es que no tendré que ver a esas tres personas por varias semanas, hasta que volvamos a clases el próximo año.

—Pero Max sigue siendo tu novio... yo creo que deberías escuchar su versión de lo que pasó.

—Es que ya conversé con él, pero sigue diciendo que Martha lo besó. Pero yo no sé que hacer... necesito pensar todo.

—Te entiendo, esto pasó recién. Tómate todo el tiempo del mundo para pensar, si él te quiere tendrá que respetar tu decisión.

—Eso espero.

Seguimos conversando acerca de mis problemas, mientras seguimos comiendo helado. Y ella me cuenta de lo bien que va su relación con Chris. Si bien yo no estoy en mi mejor momento, no puedo no alegrarme por ella, es mi mejor amiga.

Luego vemos una película y nos acostamos. Eso es lo bueno de tener una amiga como Bea, todos deberían tener una así, confiamos la una a la otra y estamos en las buenas y en las malas juntas.

(******)

Han pasado varios días desde que no he hablado con Max. Me ha enviado algunos mensajes pero yo le he respondido cortante, sólo con monosílabos, los típicos "ok", "sí", "no". Cada vez que pienso en él, recuerdo que besó a Martha. ¡Es que no sé si podré perdonarlo! Aún me duele lo que me hizo. Y con respecto a Noah y Martha, no quiero saber de ellos nunca más, no hasta que volvamos a clases.

Durante estos días lo único que he hecho es estar en mi casa, haciendo nada, si bien me he sentido mejor hay veces en la que no me dan ganas de hacer nada. Algunos días me junto con Bea, ya que ella me dice que me hace bien salir a tomar aire, despejarme un poco después de todo lo que ha pasado.

Hoy mi amiga me invitó a salir a una fiesta tranquila en casa de Chris, ella me insistió tanto que tuve que aceptar, además me hará bien para despejarme y olvidarme un momento de las tres personas que me hicieron daño.

Apenas llegamos a la fiesta, Bea saluda a Chris, que si, no les conté, ¡son novios! ¡Se ven tan lindos juntos! Y yo sólo quiero ver feliz a mi amiga, y sé que él le hace bien, se quieren, se nota. Lo saludo y entramos en la casa. Hay varias personas, algunos amigos de él, aproximadamente unas 7 u 8 personas. Nos sentamos en el sofá, mientras Chris nos tiende un vaso con algún licor, creo que vodka. Yo no soy una experta en alcohol, pero creo que era eso. Hoy me propongo no emborracharme, hoy no.

Conversamos entre todos hasta que veo que alguien más se une al grupo. Es Noah. ¡Qué tonta soy! Es obvio que él iba a venir, si es amigo de Chris. ¿¡Cómo no lo pensé antes!? !No quiero mirarlo, no voy a mirarlo!

Feelings For Him © ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora