⌱ 𝑬𝐬𝐭𝐮𝐩𝐢𝐝𝐨 𝐝𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨 § ⌲ 𝑱. 𝑱𝒌 • 𝑲. 𝑻𝒉

•°◤02◥°•

Para Jungkook era una cruel costumbre tener que salir casi corriendo del salón a la finalización de las clases hasta la puerta principal, donde se quedaba quieto como un niño obediente a un lado de ChiWon, el portero de la preparatoria. Siendo costumbre esperar junto a él a que su hermano mayor llegara a recogerlo y no corriera peligro.

ChiWon lo sabía. Sabia sobre el Bullying que ese inocente chico tímido sufría por ser un "Nerd", pero también recibía la misma excusa por parte de los directivos cuando intentaba ayudarlo: "Ellos solo juegan, son adolescentes, así de divierten. No es como que le hagan heridas."

"Se divierten mis bolas" Quería responder a veces, pero no quería quedarse sin empleo.

Entonces, lo único que su insignificante persona podía hacer para ayudarlo era quedarse junto a él en la salida y entrada, escuchando sus dulces risillas cuando le cuenta alguna que otra anécdota de sus traviesos nietos, siendo él con la única persona que Jungkook compartía palabras en ese lugar. Cuando al fin en hermano de Jungkook llegaba, se despedía con una de esas adorables sonrisas que ChiWon describía como "Sonrisita de conejo" y lo miraba correr afirmando su mochila hasta el coche. Aunque no corría por miedo a sus compañeros, lo hacia para que ChiWon se asegurará de que estaba bien y pudiera ir a comer su almuerzo calentito que le preparaba la señorita SungMi, encargada de la cafetería.

Sabia que era una molestia para él, por eso intentaba reducir su tiempo estorbando.

— Buenos días, Koo.

Como siempre, es recibido por una simpática sonrisa al subirse al coche. Esa sonrisa que apenas miró cuando tuvo que ser rápido y cuidadoso al guardar su problema debajo de sus pies sin que se diera cuenta. Pero Jungkook era bastante malo mintiendo e intentando ocultar cosas.

— Hola, Jinie.

No noto lo apagado que había sonado, y lo extraño que actuaba al no dirigirle la mirada ni por un segundo. Jeon SeokJin arrugo el entrecejo, siendo lo suficientemente evidente su extraña actitud.

— Hoy no me tarde tanto, ¿Por que te ves tan apagado?

— Nada. No es nada, Hyung.

Intentó disimular, pero aunque lo haga sabe perfectamente que Seokjin lo conoce como la palma de su mano, para asegurar que sucede todo lo contrario a nada. Y descubre el primer descuido de Jungkook.

— Hey... ¿Eso es...

Retira sus manos del volante del coche que se mantiene aparcado frente a la preparatoria y Jungkook esconde los labios. Estaba en problemas.

— ¿Otro más? — Suspiró.

— Estaba caminando distraído y choque contra alguien. Sabes que mi piel es algo sensible. — Busca mentir, apartando la mano que Jin posa sobre su clavícula al ver el moretón en proceso allí.

— No me vengas con esos cuentos, Jungkook. — Se volvió rígido. — Maldición, ¿Fue ese idiota otra vez? Te dije que debías parar esto. Debes ha-

— Y lo haré.

Interrumpe su alteración con suavidad, regalándole una pequeña sonrisa cuando se atreve a mirarlo. SeokJin no tiene habla al ver sus ojitos brillosos.