⌱ 𝑬𝐬𝐭𝐮𝐩𝐢𝐝𝐨 𝐝𝐞𝐬𝐭𝐢𝐧𝐨 § ⌲ 𝑱. 𝑱𝒌 • 𝑲. 𝑻𝒉

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Aunque todos lo vieran y trataran como uno, Jungkook no era del todo un Nerd. Había muchas cosas que él no sabía y la mayoría de cosas le costaba entender.

La verdad, es que Jeon Jungkook era bastante atontado, tanto con el cuerpo como con sus pensamientos.

Pero al pasar años y años sumergido en las lecturas, descifró cómo comprenderlas y analizarlas para poder entenderlas fácilmente, por lo que cuando cumplió dieciséis y notó cuantos chicos había con dificultades escolares a los que podía ayudar, comenzó a dar clases particulares. Siendo la mayoría pequeños de primaria y los primeros años de secundaria. Como lo era el pequeño Min JiHoon de doce años.

— Y así... Es como obtienes el resultado.

Le señaló, terminando de decorar prolija y bonitamente el resultado del cálculo como los puntos más importantes que debía tener en cuenta para no equivocarse. Estaban con ecuaciones de primer año de secundaria, sencillas y cortas, pero traicioneras a la hora de tener que intercambiar los números de lugar. Incluso esta vez, aunque se tratara de un tema simple tuvo que leer los cortos apuntes de JiHoon para recordar bien cómo hacerlo y como su profesora le estaba enseñando.

Por que así era siempre. Jungkook no tenía la mejor memoria del mundo, pero tomándose unos cortos segundos en leer lo que debía enseñar y explicar, le era suficiente y los chicos amaban estudiar con él, porque aparte de ser dulce y simpático, sus bonitos apuntes llenos de color eran muy entendibles y sencillos.  

— ¿Lo tienes?

— ¡Lo tengo! — Exclamó emocionado. — ¡Es fácil!

— Claro, cuando le agarras la mano y las entiendes, las matemáticas no son tan difíciles.

Alborotó un poco su cabello, siendo contagiado por su adorable sonrisa.

Para Jungkook, ver el avance de los chicos a los que ayuda lo hacia más que feliz y más el pequeño JiHoon. Había comenzado a trabajar con él el año anterior, cuando su madre Min GoEun, una buena amiga de su madre, lo cito porque el pequeño estaba teniendo problemas de comportamiento y compresión en las clases, sobre todo en matemática. Al principio, tratar con el pequeño JiHoon era todo un reto. Era un chico rebelde y consentido, era único hijo y sus padres le daban todo el amor del mundo, tal vez, de un manera algo errónea. A pesar de todo Jungkook supo cómo llevar la situación y después de un tiempo, se volvió su amigo, y según JiHoon, él era su Hyung favorito.

— Ten, intenta completar este solito.

Le entregó el cuaderno, habiendo redondeado con un marcador celeste el punto que le tocaba.

— Te ayudaré si necesitas ayuda.

Y dándole una ultima sonrisa, JiHoon asintió y comenzó a resolver el cálculo.

Jungkook apartó la mirada, dejándolo hacer su trabajo tranquilo y con el tiempo que le hiciera falta, confiando en él. No sabía muy bien donde mirar y estando en casa ajena, se sentía un maleducado ojeando donde quisiera, por suerte, no tuvo que aguantar mucho esa pequeña incomodidad. Su celular en su bolsillo vibró, llamando su atención. Lo tomó, encendió y ver la notificación de Kakaotalk lo dejó algo confundido. 

K. TH

Quiero creer que tu ropa no se basa solo en aburridas camisas bien planchadas y si tienes algo deportivo útil.