🐣 Pollito - Jimsu 🐣

0.3 Corazón de Pollo

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-¡Vamos Jimin! ¡No me asustes! - Los papeles se habían invertido y ahora era Yoongi quien rogaba por atención, y por atención se refiere a estar del lado afuera del baño, tocando y llamando a la puerta comenzando a desesperarse - ¿Por qué corriste de esa forma? ¿Te duele la panza? ¡Responde enano de pacotilla!

Del otro lado Jimin no podía estar mas avergonzado, su inocente y amado chico se negó rotundamente a estarse quieto con Jimin encima, mucho menos sí sus piernas estaban comenzando a dormirse provocando en ellas ese hormigueo tan desagradable que no le gustaba para nada al menor, y dado que el castaño no quería ceder tampoco y quitarse de encima, pues Yoongi no le quedó de otra que seguir revolviéndose debajo del cuerpo del castaño que le apresaba, ¿Y quién iba a culparlo, el otro aparentaba estar bastante cómodo allí arriba, mientras el sentía pinchazos en sus piernas blanquitas, no lo juzguen.

A pesar de las advertencias, jamás pensó que Jimin saldría corriendo de la habitación, después de liberar al menor y gritar su nombre tanto sorprendido como irritado, o así fue como lo interpretó Min.

Ahora, con el sudor corriendo por su espalda, el corazón a mil, la vergüenza instalada en su rostro, y rezando para que su pollito no hubiera notado nada raro, Jimin se la jugaba enserio, entre aguantar aquello que ya comenzaba a dolerle de verdad y no queriendo resolverlo al menos no con el menor detrás de la puerta atento a lo que sucedía adentro, o abrir la puerta enfrentar a esos ojitos exigentes y dejar que descubriera su problemita, y fingir que había sido por pensar en alguien más.

-Me estas asustando, por favor abre - Susurró el pálido dejando caer su cuerpo hecho bolita recostado a la puerta.

¿Por qué Jimin había corrido para esconderse de él sí lucía tan a gusto con lo que estaban haciendo? ¿Será que recordó que él era un pesado de primera y decidió escapar? ¡Seguro que se hartó de ser rechazado por él!

Es que ni un silbido recibía de parte de su Hyung anunciando que seguía con vida ¿Por qué mejor no regresaba a su habitación y dejaba de molestar? La respuesta resultó más simple de lo que esperaba, él no quería dejar a Jimin, quería volver a abrazarlo y disculparse por sus continuos arrebatos, quería jugar con él, posar para sus fotos, ver una película, ofrecerle jugar al basket solo para ganarle por gran mayoría y después regodearse en victoría mientras su mayor solo sonreía y le felicitaba con un abrazo y una enorme sonrisa.

Dejándose envolver por todos sus deseos y anhelos de volver a estar bien con Jimin, el agotado emocionalmente cayó rendido del sueño allí mismo en en suelo.

Librando una guerra consigo mismo, Jimin decidió bajarse todo con agua fría, pero no fue muy necesaria, ya que al escuchar unos suaves sollozos detrás de la puerta, se dió en cuenta que Yoongi se había quedado dormido llorando por él, bajando cualquier ánimo que cargara el castaño.

Abrió la puerta con cuidado atrapando al menor en el momento exacto, lo acunó en brazos y lo arrullo como a un bebe, era como uno sí te ponías a pensar, su pollito era delicado, sensible, emocional, cariñoso aunque no quisiera admitirlo a los demás, y sobre todo era hermoso.

-¿Jimin? - Preguntó con voz ronca restregando sus hinchados ojos, no entendía como terminó en los brazos ajenos, pero ya era costumbre eso de estar rodeado por Park.

-¿Sabías que haces un piquito al dormir? - Habló con dulzura sin soltar al chico - ¿Tienes hambre?

Yoongi asintió sin saber que decir, esperaba que al despertar pudiera razonar con Jimin y disculparse, pero en cambio allí estaban, tan cerca, siendo custodiado por los brazos ajenos. Recibiendo esa mirada tan amorosa ¿No se había cansado de su persona?

-Oye ya afloja ese entrecejo que después no lo vas a poder soltar y vivirás el resto de tu vida con cara de viejo amargado y cuerpo de niño - Bromeó mientras ambos se ponían de pie estirando el cuerpo.

-Pues entonces vivirás tú el resto de tu vida al lado de este viejo - Soltó sin pensar mordiendo su lengua tras haberse escuchado.

Sí, tal como esperaba esa sonrisa pícara que aunque negará admitir que le gustaba, a veces también deseaba borrar.

-¿Eso es una propuesta de mi pollito? - Indagó alzando una ceja juguetón.

Para su sorpresa no hubo ninguna volteada de ojos descomunal, ni siquiera una mínima, ni un gesto de desagrado, nada, Yoongi solo estaba allí de pie frente suyo con la boca abierta y con el sonrojado más fuerte que él pudiera recordar haber visto en el menor, completamente adorable, pensó antes de tomar la mandíbula del chico y cerrar su boca.

-Prepararé algo rico para cenar - Indicó - Más te vale comer todo lo que haga.

Yoongi observó pasmado como el contrario se dirigía tranquilamente a la cocina tarareando alguna canción, mientras él aún procesaba todo lo que había sucedido en su día desde esta mañana, concluyendo para su alegría y sorpresa que Jimin seguía siendo el mismo con él.

Y él seguía siendo su pollito a pesar de todo.

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