Here U Are | minjoong

Capítulo 34

Kang Yeosang despertó en un lugar completamente desconocido.

Estaba acostado sobre un gran sofá gris, mientras su alrededor olía a tabaco. No había ni una cama y ni una cocina, por lo que parecía más bien una oficina. Ese definitivamente no era su departamento.

Desorientado, se levantó rápidamente del sillón, apresurándose para salir de aquel lugar.

Pero al salir por la puerta, sorpresivamente se encontró con el bar de la noche anterior, sintiéndose aún más perdido de lo que ya estaba. Más sin embargo, para su suerte o no, un chico visiblemente mayor que él llegó por la puerta trasera.

—Vaya, hasta que despertaste.

La voz del azabache resonó entre las cuatro paredes, pero sin dejarse intimidar, el de cabellos dorados respondió de manera defensiva.

—¿Eh? ¿Y tú quien eres?

Y mirándolo de reojo con una sonrisa socarrona, Park respondió —Soy el dueño del bar. Anoche te encontré durmiendo allá atrás. No llevabas el móvil encima, así que te deje durmiendo en la sala de personal.

Sobrexaltándose, Kang revisó sus bolsillos, revisando que efectivamente su celular ya no estaba, queriéndose dar un disparo por ser tan imbécil.

Pero antes de poder maldecir por lo bajo, Seonghwa se apresuró en hablar.

—Si ya te has despertado, lo mejor será que te vayas.

Yeosang miró como el chico entraba a la cocina del lugar, e ignorando la petición del pelinegro se adentró junto a él, curioseando un poco más su alrededor.

—¿Vas a cocinar algo? —preguntó al ver como el más alto sacaba algunas verduras del refrigerador.

—Síp.

—Tengo hambre. Hazme algo a mi también —demandó como se tratase de su sirviente, pero en lugar de molestarse, Park decidió seguirle su juego.

—No sé, no sé... —respondió con un tono ladino.

—Te pagaré.

—Cómpratelo en otro lado.

Bien, el castaño se empezaba a molestar.

Y no pensaba dejar ganar al azabache frente a él.

—¿Qué problema tienes? Trabajas aquí, ¿no?

—Todavía no hemos abierto, así que no pienso venderte nada —refutó el mayor.

—¡Me da igual, yo quiero comer aquí!

Bien, el menor era un tanto molesto.

Park solía enfrentar a ese tipo de clientes a diario, y jamás dejaba que nadie le dirigiera la palabra de esa manera.

Pero, esta vez, haría una excepción.

Estaba aburrido, y ese chico definitivamente además de ser una cara bonita, era bastante decidido y hasta un poco intimidante. Completamente interesante.

—Bueno... Si quieres comer aquí, tienes que hacer tres cosas.

—¿Qué cosas...? —preguntó Kang un poco nervioso, ya que el azabache lo miraba intensamente, como si estuviese analizando la situación para atravesarle un cuchillo por el estómago.

Sí, así de intimidante era.

—Uno; tienes que lavar los platos. Dos; darme las gracias.

El más alto tomó una pausa, esperando con una ceja alzada los agradecimientos del menor, quien rodó los ojos después de captar la indirecta.

—Gracias —habló de la manera más despectiva posible, ganándose una risa burlona del otro chico —. Bien, ¿y cuál es la tercera condición?

—Dime tú nombre y tú edad.

—Solo si tú me dices los tuyos después.

Bien, definitivamente aquel chico era un caso especial.

El mayor asintió ante la petición del más bajito, para después escuchar como el chico con la pequeña marca hablaba con pena al cabo de unos segundos en silencio.

—Mi nombre es Kang Yeosang, y tengo 18 años.

—Un gusto, niño. Soy Park Seonghwa, y tengo 32 años. Así que asegúrate de decirme hyung.

Las cosas se pondrían interesantes a partir de ahora.

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¡He aquí el maratón que les prometí por mi bday!

¿Cómo están? ¿Han descansado bien?

Espero que hayan disfrutado estos caps y que se encuentren muy bien

¡Nos leemos pronto!

- Ren 💛