Capítulo 42

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—San-hyung.

Aquella voz hizo detener abruptamente al rubio quien apenas salía de sus clases.

A decir verdad, era exageradamente tarde, por lo que a Choi le sorprendió que alguien menor que él estuviese en el campus a esa hora.

El mayor se giró hacia el lugar de dónde provino la voz, acercándose a paso lento al castaño que por primera vez lo había llamado.

—Mingi... —dijo San en modo de saludo, mirando como el más alto solo asentía con la cabeza.

—Necesito hablar contigo.

Song fue directo, tratando de no perder más tiempo.

Choi (a pesar de estar en una especie de shock por aquel acontecimiento) aceptó la propuesta del menor, alejándose de la multitud para sentarse en el pequeño parque al centro de la universidad.

El problema fue contado por Mingi de principio a fin, haciendo atar los cabos sueltos de su mayor, quien ahora entendía el repentino cambio de actitud en su amigo pelirrojo.

Porque, en efecto, Kim Hongjoong volvía a ser el chico introvertido de antes. El chico que veía al mundo de la manera más negativa posible. El chico que deseaba desaparecer.

Y eso no le gustaba para nada a San.

—Entonces, ¿para qué me necesitabas? —preguntó el rubio una vez Song terminó de contarle su situación.

—Quiero que me hables de los problemas de Hongjoong. ¿Por qué cosas ha tenido que pasar? —preguntó el castaño totalmente preocupado.

—En la preparatoria tuvo dos novios, ¿no te lo ha contado? —el menor negó, entonces Choi siguió contando —. Nunca me ha hablado sobre ello en mucho detalle, solo sé que ambos eran heteros. No es difícil adivinar que ambos salieron con él por curiosidad. Esos dos tuvieron un gran impacto sobre él.

Fue en ese momento que Mingi entendió la insistencia de Kim, el por qué lo rechazó y el por qué trató de protegerlo.

Y él pudo confirmar una vez más que seguía amando a ese chico.

—La verdad es que no te conozco muy bien, pero puedo asegurar que eres alguien importante para Hongjoong. Siento que te trata de manera especial. Te atesora mucho. Seguro que piensas que su actitud hacia ti es algo extraña... Unas veces alegre y otras desagradable... —habló el rubio con una mirada nostálgica —. Recuerdo que hace unos meses me contó lo que ocurrió en la piscina. Se enfadó muchísimo porque te vió estar con los tipos que se metían con él. Odia a la gente así, y se enfadó tanto porque no soportaba que fueras como ellos... Hongjoong es bastante complejo. Aunque parezca que le da igual, en el fondo es muy consciente de su identidad homosexual. Le importa mucho lo que piensen los demás, a pesar de que intente ocultarlo.

Entonces San tomó una pausa, pensándose dos veces si revelar aquello.

Pero la mirada en Mingi decía más que mil palabras, convenciéndolo de que era hora de ponerle fin al tormento de Hongjoong.

Y el único que podía hacerlo era ese castaño a su lado.

—Me dijo que no quería arrastrarte al mundo homosexual, porque él mismo sabe lo difícil que es vivir así. Solo quiere protegerte... Aunque también creo... que lo que más le asusta es que acabes dejándolo.

¿Si moriría por exponer algo tan íntimo como aquello? Tal vez.

Pero San se dijo así mismo que al menos moriría como un héroe.

—Pero si le dije que me gustaba... —mencionó Song, quien estaba realmente estresado por no poder hacer algo más.

Poniendo una de sus manos en su ancho hombro, Choi dió leves palmaditas para calmar la preocupación de su menor, cosa que logró después de un par de segundos.

Y una vez el más alto estuvo calmado, San decidió dar su última palabra.

—Hay veces... en qué decirle a alguien que lo quieres no es garantía suficiente. Sentir algo por él es agotador, ¿no? ¿Vas a rendirte?

—Solo si yo a él no le gusto.

—¿Por qué estás tan apegado a él?

Mingi se lo pensó por unos segundos, y los flashbacks no tardaron en llegar a su sistema.

Así que, sonrojándose levemente, se confesó ante su mayor.

—Porque fue él... el que hizo que me gustara la universidad. Gracias a él he podido disfrutar de muchos momentos felices. Quiero que él también disfrute y sea feliz. Para mí, eso es lo más importante.

San sonrió y estrechó su mano, sintiéndose completamente orgulloso.

Ese chico sí que era el indicado para su mejor amigo, y no pudo sentirse más tranquilo en ese momento.

Después de intercambiar un par de palabras más ambos chicos se despidieron, tomando caminos opuestos.

Ahora Mingi tenía una razón más por la cual pelear por su hyung, y no pensaba rendirse hasta lograrlo.

Porque Kim Hongjoong era, y siempre sería lo más importante para él.

Así que mirando el cielo y soltando un suspiro, el castaño murmuró para sí solo.

—Ahora ya se lo que piensas. No pienso dejarte solo nunca más... Espérame.



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Hi hi!

¿Cómo han estado?

¡Les vengo a decir que actualizaré más seguido! Logré avanzar mucho con la historia así qué tal vez venga con aunque sea un capítulo cada dos o tres días

¡Espero que de verdad estén disfrutando esta adaptación!

- Ren 💛

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