𝒃 𝒊 𝒑 𝒐 𝒍 𝒂 𝒓 𝒊 𝒕 𝒆 🍁 𝒌𝒐𝒐𝒌𝒗

Kiffance.

El frío era lo que menos incomodaba al grupo de personas que se encontraban fuera de la escuela ese viernes por la noche. Todos miraban expectantes a la rejilla principal, esperando a que esta fuera abierta.

Taehyung no estaba tan emocionando como los demás. Esta sería otra fiesta más y ya. Sin embargo, había algo que le causaba curiosidad, cuando había escuchado a Namjoon decir que tenía la ropa perfecta para esa noche realmente lo creyó, pero ahora, al verlo con ese traje de tortuga ninja, no le cabía duda que su amigo podía ser extremadamente raro en ocasiones. Incluso llevaba un antifaz rosado.

—Bueno, chicos —dice Jisoo entusiasmada y con un volumen bajo, no quería hacer mucho desorden fuera de la escuela. Debían entrar calmados y en silencio, ya dentro todo sería diferente—. Vamos a hacer una noche clandestina en la escuela.

La castaña sintió su corazón salirse cuando los demás no pudieron evitar gritar un "sí" fuertemente.

—Esperen, hemos dicho mega discreto. Entonces no nos dejemos llevar. El plan es ir a la sala común, allí está todo listo, nadie entra sin la contraseña del evento.

—Por otro lado, pregunta. ¿Cómo se hace, Jisoo? Porque la contraseña está rota. Es... —dice Yoongi llamando la atención de todos y divirtiéndolos.

—Chica, ¿a quién le importa la contraseña? —susurra Jennie a la castaña—. Si están aquí es porque recibieron la invitación.

—Ah si, ¿y si hay un topo entre ellos? ¿cómo lo hacemos? —le responde la castaña a Jennie, después se dirige a Yoongi—. Bueno, dale la contraseña a Jennie. Si no, no te vayas a casa, ella tiene órdenes.

—Tú nunca me das órdenes —dice Jennie.

—Ella tiene instrucciones —corrige la castaña—. Bueno, ni un sonido hasta la sala común. Y si hay débiles entre nosotros, pueden irse a casa, no los queremos. Muchas gracias.

Mientras la castaña hablaba, Taehyung gira en torno a todas la personas de pie, con la intención de ver si distingue una chaqueta café. Sin embargo, no lo hace.

—Rosé, haz los honores.

La peliazul sonríe para después subirse por una gran escalera que fue previamente colocada en la rejilla de la escuela. Los demás esperan pacientemente en silencio y se emocionan cuando Rosé hace un saludo militar al hallarse del otro lado de la rejilla.

—Máscaras, capuchas —ordena Jisoo. Ella sabía que de esta forma sería más sencillo mantener el anonimato mientras entraban a la escuela. Todos se colocan lo indicado—. ¿Están listos para la infiltración?

—¡Si, si! —responden todos al unísono.

—Yo me infiltraré en ti —grita Namjoon, ganando una mirada reprobatoria de los demás.

—¿No tienes miedo? —susurra Jennie para que la castaña sea la única que la escuche.

—Casi me pongo un pañal para evitar orinarme encima. Cuando tienes que irte, tienes que irte. ¡Kiffance!

—¡Kiffance! ¡Kiffance! —los demás entonaban a modo de canción la contraseña.

—¡Sí! —gritaron levantando los puños una vez que la rejilla fue abierta.

Jisoo saltaba emocionada en su sitio y lista para dar la mejor fiesta de sus vidas.

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Minutos después, la música y las luces revolucionaban los sentidos de cada una de las personas que se encontraban en la sala común. Era un grupo de personas unidas con el mismo fin; pasarla bien y llenar su cuerpo de alcohol hasta el grado de no acordarse de nada al día siguiente.