La mañana en la cafetería se fue de lo más tranquila, no había casi gente por lo que tuvimos mucho tiempo para conversar y molestar a Connor, y bueno, ellos también me molestaron a mí con bastantes puntos controversiales de mi relación con Jordan.
En cuanto al rubio... Ha estado actuando extraño desde la madrugada, bueno, aunque la tensión pareció desaparecer de golpe luego de nuestro encuentro amoroso. Sin embargo, me tenía preocupada su actitud sobreprotectora de hoy, él siempre ha tratado de ser cuidadoso al momento de salir conmigo y todos eso, pero hoy esa actitud se elevó.
Sin contar, el hecho de que haya rechazado mi dinero. O sea, sé perfectamente que la familia D'Arco tiene más dinero del que yo podría conseguir en diez vidas, pero vamos, solo quería agradecerle. Hablaré con el señor Eliam luego.
Aprieto el agarre en mi chaqueta sintiendo el frío calar por mis huesos, sacudiéndome un poco.
—¡Bailee! —exclama Rachel al otro lado de la calle, agitando su mano en mi dirección. Sonrío al verla correr como niña pequeña hacia mí, luego la tengo prácticamente sobre mi abrazándome—. ¡Estás muy linda!
—Gracias, tú también te ves muy bien —le sonrío luego de sonrojarme, observándola con su pequeño short de mezclilla tiro alto y su camisa blanca que dice BOOS—. ¿Cómo has estado?
—Excelente, en realidad —frota su cabello con la palma de su mano, sin importarle que esté se alborote—. He estado ocupada con el curso de cocina que estoy haciendo.
—Tú solo lo haces para comer —me burlo una vez que ella entrelaza su brazo con el mío y comenzamos a caminar en dirección contraria a la cafetería.
—Sí, aunque también quiero aprender a cocinar cosas nuevas, estoy estresada de la lasaña —hace una mueca de disgusto y sigue caminando con alegría.
—¿A dónde vamos? —le pregunto cuando cruzamos la calle.
—Al lote de Brox —mira hacia ambos lados—. Me ofrecí como tributo para llevarle una información y James está muy atareado hoy, por eso me dejó venir.
—Oh, ahora Brox me va molestar —me lamento a lo que ella sonríe—. Tú sabes porque Jordan está actuando así, ¿verdad?
—Bailee, yo... —se aclara la garganta bajando la mirada—. Las cosas están un poco tensas, lo único que puedo decirte es que alguien está buscando territorio y eso no es conveniente para nadie —explica con el ceño fruncido—. No podemos dejarnos robar terreno, es inaceptable para las personas de este mundo, ¿si me entiendes? —asiento—Aunque ya tú formas parte de este mundo, pero... no te preocupes, ¿sí?
—Está bien.
—Y por la actitud de Jordan... Tienes que esperar a que él te cuente, ¿okey? —eso me deja un poco más intranquila, pero trato de relajarme a medida que caminamos—. No creo que sea nada malo, tampoco. Además, sabes cómo es Jordan —rueda los ojos—. Eres su muñequita de cristal y hará hasta lo imposible por tenerte a salvo.
ESTÁS LEYENDO
Una bestia bajo la tormenta
RomanceCada uno de mis muros se vinieron abajo cuando te vi, no pude aplacar mis sentimientos y todo mi mundo se puso de cabeza. Amarte fue como volar y salir de órbita. Pertenecerte fue como arrodillarse sobre lava caliente. Formar parte de tu vida fue co...