Rey Oscuro.

XXV.

Gracias a los nuevos seguidores, les mando un saludo.

Ni Naruto, ni Fairy Tail me pertencen. Todo derecho es de sus respectivos dueños.

Empecemos...

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Cuidad de Sikka.

El grupo de hadas se encontraba en un barato hotel de aquella cuidad, a kilómetros de la capital del reino, su próximo objetivo.

- Así que Horologium me salvó. Dijo que había percibido una curvatura en el espacio y, me refugio temporalmente en otro espacio- explico la maga estelar.

- Mi caso no tengo que explicarlo. Es igual al suyo- dijo Naruto señalando a los dos restantes dragon slayers-. Como sea, Mystogan apareció, nos explico la situación y nos dio una medicina para poder usar magia en este mundo- resumió el rubio sentándose en un sofá.

- Igual. Si Natsu no puede usar magia, estaremos en desventaja en la pelea- informo Lucy dejando en silencio la habitación.

- ¿Va enserio lo de enfrentarse al reino?- pregunto Edo-Lucy.

- ¡Pues claro!- exclamo contento Natsu.

- ¡Es por nuestros nakamas!- dijo Happy alzando una patita.

- (¿De verdad esta soy yo?)- pensó Lucy estudiando a su otra yo-. (¿La muerte de mi hermano me cambiaría tanto?)-

- (Que rara es esta gente. Pero tengo la sensación... de que quizás ellos... si puedan cambiar el mundo)- pensó Edo-Lucy.

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Al otro día. Por la madrugada.

Silenciosa como un felino Edo-Lucy agarro sus cosas para partir de vuelta hacia su casa, aprovechando la oscuridad de la noche que se escapaba.

- Están desesperados por sobrevivir- exclamo una voz somnolienta dando indicios que recién se levantaba.

- Naru- expreso la rubia con ahora el pelo corto, cortesía de Cáncer.

- Conociéndote se a donde iras y que harás- dijo Naruto bostezando-. Capaz podamos rescatar a nuestros amigos con nuestra fuerza, pero enfrentarse a todo un reino es más difícil-

- Lo sé, es hora que también nos alzemos. Es hora de volver a pelear, eso sería lo que Naruto diría- río suavemente Edo-Lucy abriendo la puerta de entrada.

- ¿Cuando crees que la gente muere?- pregunto Naruto viéndola. Esa pequeña frase gano la atención de Edo-Lucy. Llevándose la mano al pecho, sonrío-. ¿Cuando le atraviesan el pecho con una espada? No. ¿Cuando son destrozados por una enfermedad incurable? No. ¿Cuando son envenenados? ¡No! Es cuando... son olvidados- exclamo sonriendo Naruto de oreja a oreja.

-Naru- expreso soltando un par de lagrimas.

- Ve por Fairy Tail. Tienen que cumplir el sueño de Edo-Naruto- dijo haciendo con su mano el gesto para que se fuera.

- Nos volveremos a ver- expreso Edo-Lucy yéndose.

- Si-

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Más tarde ese día. Cuidad Imperial.

El grupo por fin había llegado a la capital, todo gracias a Edo-Natsu que los había alcanzado con su vehículo mágico.

Los niños jugaban en la calle sin miedo, la gente charlaba contenta. En fin una buena cuidad.

- Es muy distinta a Rouen y Sikka. Parece un parque de atracciones- exclamo Naruto viendo para todos lados.