Rey Oscuro.

XXXIV.

Ni Naruto, ni Fairy Tail me pertenecen. Todo derecho es de sus respectivos dueños. 

Empecemos...

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Subterráneo.

- ¡Maldito! ¡No dejare que escapes!- exclamo con furia Trébol disparando una cadena pegajosa hacía Lyon que estaba ayudando a Bacchus.

Antes de crear un muro de hielo para defenderse, un pilar de tierra apareció protegiendo a ambos magos.

- Jura- menciono Lyon viendo llegar al mago santo acompañado de decenas de magos y soldados.

- ¡Que empiece el contraataque!- dijo sonriendo Jura.

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Palacio.

Doflamingo salio disparado hacia atrás chocando contra la pared. Varios soldados se lazaron contra Naruto pero ninguno pudo hacer nada. Viendo a Jellal, el dragon slayer se acerco a el para despertarlo con un golpe.

- Duele- exclamo Jellal despertándose y dándose cuenta en donde estaba-. ¿Naruto?-

- Si, ¿a quien esperabas?- pregunto acercándose-. ¡Ahora quédate quieto, voy a liberarte!-

El piso en donde estaban se deformo siendo atacados por un pilar que emergió de él.

Doflamingo apareció detrás del peliazul listo para decapitarlo. Al ultimo segundo Naruto apareció poniendo a Jellal contra el piso, salvandolo. La patada de Doflamingo siguió de largo cortando toda la torre horizontalmente.

- ¡Rey Oscuro!- exclamo el quinto mago santo.

De la mano derecha de Doflamingo salieron cinco hilos tratando de cortar al rubio, pero los esquivo rodando por el suelo.

Levantándose rápidamente, Naruto formo una lanza oscura y la tiro contra su enemigo. Antes de impactar, varios hilos la destruyeron.

Una sombra se puso detrás de Naruto sonriendo.

- ¡¿Un clon?!- exclamo el dragon slayer viendo a otro Doflamingo.

El clon corto la espalda de Naruto con sus hilos mandandolo hacia el frente, donde, el Doflamingo original lo recibió con un golpe en toda la cara.

- ¡Naruto!- grito Jellal viendo al rubio estrellarse contra una pared. El peliazul se maldijo levemente, si no estuviese encadenado podría ayudar.

Una enorme sonrisa comenzó a crecer en el rostro de Doflamingo.

- Fufufufu. La catástrofe que esta por suceder, hará que aquella noche hace diez años, parezca una pequeña mierda- río comenzando a caminar-. ¡Pica! ¡Saca a estos mocosos de aquí!- ordeno.

Pronto el suelo comenzó a deformarse y una mano enorme emergió de este. La mano agarro a Naruto y Jellal, lazandolos afuera del palacio.

En medio del aire, Naruto agarro al peliazul y ambos se estrellaron contra el suelo.

- ¡Maldición! ¡Tendremos que subir todo otra vez!- exclamo el dragon slayer viendo para arriba.

- ¿Que es eso?- pregunto Jellal.

En el palacio, un hilo salió disparado hacía el cielo, para luego dividirse en miles encerrando a todo el reino en una especie de jaula.

De los hilos, hilos más pequeños comenzaron a salir pegándose en la gente.

- Parasito- exclamo Doflamingo moviendo sus dedos.

Por toda la cuidad personas comenzaron a ser controladas por los hilos de Doflamingo.