Pasaron un par de días, y todo continuó más que perfecto entre Mina y Chaeyoung. Después del mágico momento que compartieron esa noche, era imposible que las cosas no estuvieran mejor entre las dos.
Ambas aún seguía recordando esto al verse y no podían evitar sentirse tímidas de nuevo, pero no se arrepentían en lo absoluto, al contrario pensaban en repetirlo... ¿por qué no?
Los últimos días en el colegio estaban siendo una locura. Chaeyoung recibían más amenazas escritas en pequeñas notas que diferentes chicos le entregaban sin decir nada más.
No entendía porqué estaba sucediendo eso... Esto iba más allá de una estúpida broma, alguien estaba realmente empecinado en molestarlas y destruir su relación.
Aún no le mencionaba nada a Mina al respecto, y mucho menos a las chicas, no quería preocuparlas con estas cosas. Estaba segura que quien sea que la estuviera molestando, se detendría en cualquier momento y la dejaría en paz.
Las cosas en casa continuaron en el mismo trance, creo que mencionar esto ya carece de importancia.
Chaeyoung trataba de pasar el mayor tiempo posible cerca de Mina para lograr evadir esas cosas, por supuesto, esto funcionaba con éxito y contrarrestaba la pesada y tormentosa energía que recibía al llegar.
Todos estaban notando como la conexión entre ambas se estaba intensificando y volviéndose más real. Esto era algo que alegraba a sus amigos en gran manera, pero también había otras personas a la cuales no... Y quizás, eso podría poner en peligro su relación y dar un giro drástico a las cosas.
Cuando todo parece ir mejor de lo esperado, es cuando una fuerte tormenta se avecina... Lástima que Chaeyoung y Mina no se prepararon para esto.
Era miércoles, Mina estaba en la biblioteca junto a Nayeon riendo y bromeando sobre algunas cosas.
—¡Tienes que invitar a Chaeryeong a ver animes en casa! —exclamó.
—Puede ser, Nay —sonrió—. Ella a veces tiene problemas para salir, pero le diré, ¿bien?
—¡Bien! —sonrió.
Pasaron unos minutos, hasta que vieron como la propietaria llamó la atención de los pocos trabajadores que habían por el lugar... Les iba a presentar a una nueva empleada, al parecer.
—Les quiero presentar a una nueva chica que comenzará a trabajar con nosotros a partir de hoy —anunció.
A su lado estaba una chica toda vestida de negro y con una gorra que casi cubría todo su rostro, era rubia, por lo que se podía deducir.
Nayeon la miró y abrió los ojos al recordarla, por supuesto que la reconoció.
—¡JEONGYEON! —se abalanzó para abrazarla.
Todos miraban esta escena confundidos, pero riendo a la vez. La reacción de la chica fue quedarse paralizada mientras Nayeon se le subía encima y se aferraba más.
—¿Me recuerdas? —la apretó.
—Eh, no —susurró intentando zafarse.
—¡Soy Bunny! —la soltó e hizo un puchero.
—Ah, sí —se sonrojó.
—¡Serás mi nueva amiga! —volvió a abrazarla riendo.
La propietaria comenzó a reír al ver esta escena, sin duda daba mucha ternura.
—Ella es Yoo Jeongyeon, me alegra y la reciban bien —sonrió—. Si pueden ayudarla en lo que no entienda, mucho mejor, ¿puedes, Nayeon? —la miró expectante.
ESTÁS LEYENDO
𝕋𝕨𝕠 𝕎𝕠𝕣𝕝𝕕𝕤 ℂ𝕠𝕝𝕝𝕚𝕕𝕖 | 𝕄𝕚𝕔𝕙𝕒𝕖𝕟𝕘
RomanceSon Chaeyoung, una joven que sabía perfectamente lo que era vivir entre la opresión y el temor a mostrarse tal y como era. Siempre que quería enfrentar a las personas que tanto daño le inflingían, algo se lo impedía. Myoui Mina era una chica que só...