𝕋𝕨𝕠 𝕎𝕠𝕣𝕝𝕕𝕤 ℂ𝕠𝕝𝕝𝕚𝕕𝕖 | 𝕄𝕚𝕔𝕙𝕒𝕖𝕟𝕘

Chapter 3 - Her silhouette looks like...

Ese día transcurrió con normalidad. Chaeyoung siguió en las clases restantes, hasta que sonó el timbre dando por finalizado el dia.

Chaeyoung salió del salón encontrando a Sana y Tzuyu fuera de éste esperándola para pasar el rato antes de irse cada una a su casa.

Las tres chicas iban caminando y conversando hasta que se sentaron en un pequeño banco que estaba bajo un árbol.

—No saben cuánto detesto la física, ¿a quién demonios le puede gustar semejante materia satánica? —expresó la japonesa llevando las manos a su rostro.

—Eres el ser más dramático de la faz de la tierra, por Dios, es realmente sencillo —dijo la más baja.

—¡No lo es! —insistió.

—Claro que sí, sólo que tú en vez de prestar atención te la pasas toda la clase pensando en cierta persona —acusó indirectamente.

—¿Estás celosa, Son? —preguntó la taiwanesa.

—Claro que no, ¿estás demente? —preguntó con ironía—. Bien sabes que tú la distraes, por eso no presta atención en clases.

—No seas aguafiestas, ChaeChae —comenzó a reír—. A veces actúas como si fueras mi madre, Chewy no me distrae de nada —dijo antes de abrazar a su novia.

—Déjala amor, ella sólo es así porque no se ha enamorado —señaló—. Sólo espera a que llegue la chica capaz de volverla loca —dijo alzando sus cejas con picardía.

—Como digan, sé que no necesito nada de esas cosas —insistió.

La conversación llegó hasta allí, ya que Chaeyoung odiaba hablar de esas cosas, y Sana y Tzuyu respetaban esto, aunque no estuvieran de acuerdo con ella.

Los estudiantes comenzaron a subir al autobús que los llevaría de vuelta a sus respectivas paradas. Chaeyoung al ver esto se levantó dispuesta a irse, hasta que Sana la detuvo.

—ChaeChae ¿por qué no vienes conmigo a casa de Tzuyu? —preguntó tomando su mano.

—No, tengo que irme, podría tener problemas —susurró.

—¡Vamos, Son! Sólo será un rato. Papá puede llevarlas a ti y a Sana a sus casas antes del anochecer —ofreció.

—¡Cierto! Vamos, no seas así, hace mucho que no visitas la casa de Tzuyu —mencionó—. Aparte, no creo que vayas a tener problemas, tu mamá nos conoce.

—Bueno, está bien —cedió—
Sólo controlense, por favor —pidió entrecerrando los ojos.

—¡Entendido! —dijeron ambas chicas al unisono junto a una señal militar.

Las tres comenzaron a caminar hasta dirigirse a la casa de Tzuyu. La verdad, la chica no vivía tan lejos del colegio, ésta era la razón por la cual no necesitaba tomar el autobús a diario. Así que siguieron caminando entre risas y bromas, hasta que llegaron.

Desde que la familia Chou conoció a Chaeyoung no pudieron evitar encariñarse con ella y tratarla como una hija más, cosa que la chica apreciaba de gran manera.

Por supuesto, no siempre las cosas fueron así de fácil... Cuando Sana y Tzuyu se armaron de valor y revelaron que estaban en una relación, los padres de ésta no lo aceptaron.

Ellos se rehusaban completamente a aceptar que su hija estuviera en una relación con otra chica. Y esto los llevó a buscar maneras de separarlas y romper con ese lazo que ambas habían formado.

Afortunadamente, un día las cosas tomaron un rumbo diferente. Los padres de Tzuyu al ver en el estado depresivo que había caído la chica debido al rechazo que éstos ejercían contra ella y su novia, decidieron actuar con el corazón y darle una oportunidad a Sana.