Prólogo.

874 51 0
                                    

Si tuviera que poner de ejemplo a una familia peculiar, esa sería la mía.

Nunca consideré que mis padres fueran normales teniendo en cuenta que tienen cuarenta y pico años y todavía piensan que tienen veinte. Y aunque eso para cualquier chica de mi edad pueda parecer raro, para mi es la cosa más mágica y especial del mundo.

Mis padres se aman como dos adolescentes que acaban de empezar una relación. A mi hermano y a mi nos han dado una infancia repleta de amor y no cambiaría por nada cada una de sus sonrisas juntos. Porque amarse incondicionalmente como lo han hecho ellos toda la vida, me demuestra que el amor verdadero existe y que no hay que tener miedo a ir a por todas.

Yo siempre he soñado con tener mi cuento de hadas, y mamá a pesar de todo se ha encargado de dejarme claro que en el camino del amor siempre hay piedras, y que para llegar tan lejos como hasta día de hoy lo han hecho ellos, se tiene que pasar por mil y una situación complicada.

Soy joven. Tengo diecisiete años y medio y toda una vida por delante, pero no veo la hora de enamorarme y tener una historia de amor como la de mis padres; con sus idas y venidas, con sus más y con sus menos, con distancias imposibles y con actitudes impulsivas que un amor incondicional, ha podido manejar.

Nunca sacaré un mal aprendizaje teniendo en cuenta que todo pasa por algo. Absolutamente todo, como el amor de Aron Disel y Megan Goxwell, que está escrito en alguna parte.

GIN DISEL🦋

Introducción.

"Gin Disel, la preciosa hija mayor de Aron Disel y Megan Goxwell"

"La vida secreta de la hija del abogado de los famosos"

"Gin Disel no seguirá los pasos de sus padres y estudiará arte"

¡Que locura esa de portar apellidos tan importantes!

No puedo pretender que mi vida sea normal teniendo como padre al abogado más famoso de Estados Unidos y como madre a una de las actrices más reconocidas y queridas del panorama.

La fama de mi madre acaba por ahogarme, y que mi padre sea el abogado de gente tan importante tampoco ayuda a tener un perfil bajo, porque se codea con la alta sociedad del país incluyendo también a famosos, y puede llegar a ser estresante.

No es que me moleste la situación, porque siempre han cuidado nuestra intimidad a pesar de todo, pero hay momentos en los que me encantaría que tuviesen un trabajo y vida normal.

¿Que loco, no?

Todas las chicas de mi edad, desean estar en mi lugar, y yo estoy deseando cedérselos un solo minuto, no por el estrés, a eso al fin y al cabo ya estoy acostumbrada, si no porque cuando mis padres tienen mucho trabajo, es duro estar tanto tiempo sin verles, y mis diecisiete años y medio no quitan que los necesite.

Esta semana pasada la han tenido complicada, porque mamá ha tenido ensayos de la obra que protagoniza y papá tres juicios, por eso ahora que por fin han acabado y están en sus días de descanso, George, papá y yo hemos organizado un planning de cosas para hacer juntos.

Por ejemplo ahora, estamos viendo una película tirados en el sofá, mientras mamá estudia un poco el guión en la mesa grande del comedor.

Un planazo que echaba de menos.

Llevo palomitas a mi boca mientras miro atenta la pantalla y mastico sin parar.

-¿Cuando vamos a ir a Argentina de nuevo? -pregunta George llamando nuestra atención.

LA SOMBRA DE LAS MARIPOSAS Donde viven las historias. Descúbrelo ahora