Mavi! Buuuhhh... Mavi! Buuuhhh... Mavi! Buuuhhh - dice Hande mientras juega con su sobrina acercando su cara a su cuerpo y haciéndola reír.
Mavi no puede más de alegría, la conexión entre ambas en innegable y definitivamente confían mucho en la otra. Murat que está sentado a su lado, trata de interactuar con ambas, pero ellas están en su mundo del cual no pueden salir y al que nadie más puede entrar.
Ambos llegaron a las 14:10 a la casa de Gamze, no fueron los primeros, ya había invitados. Hande no pensó que habrían tantas personas y esto la preocupó bastante, sobretodo porque las condiciones de pandemia actuales decían que no debían haber reuniones tan concurridas, su preocupación llegó a tal nivel que decidió que interactuaría lo menos posible y estaría más bien con su sobrina y cuando la necesitaran, no quería arriesgarse demás, sobretodo porque prontamente tendría que empezar a grabar una serie nueva y no podía verse afectada.
Hande más de una vez se arrepintió de haber ido a la fiesta y se cuestionó su decisión. 'Hay veces en que no entiendo porque no puedo decir que no', era el pensamiento que la rondó prácticamente toda la tarde.
Conocía a todos los que estaban presente, pero no tenía ánimo de sociabilizar, por ello el que fuera de día y Mavi haya estado tan activa le sirvió para entretenerse. Por todos lados tenía gente queriendo que celebrara hasta el límite y ella no tenía ánimo para ello. Algo dentro de sí le decía que no debía hacerlo, pero más profundo aun, algo dentro de sí, le decía que si no quería, no tenía por qué hacerlo. Hace mucho tiempo que no escuchaba esa voz interior, había estado ausente, de hecho pensaba que se había ido, 'por qué tengo que compartir con todos ellos si no quiero? Y si solo quiero disfrutar con Mavi, qué malo hay en ello?', estos pensamientos comenzaron a rondarla y hacían que se cuestionara toda respuesta que daba.
Pasadas un par de horas, llega su amiga Burcu, la cual se integra rápidamente al grupo principal, en un momento va donde está Hande a preguntarle que por qué no quiere unirse y ella le responde que no tiene ánimo para eso, que prefiere seguir con Mavi, se pone de pie y camina hacia el patio. El día está templado, un día primaveral hermoso y muy tranquilo, quién diría que fuera de esas paredes hay un mundo en el que una pandemia está afectando.
Burcu un poco confundida, sigue a Hande hasta el centro del patio y se sienta con ella y Mavi en el pasto. Mientras ambas siguen en su mundo jugando, decide tomar la iniciativa y averiguar qué es lo que sucede.
- Hande, somos amigas desde hace mucho tiempo y se cuando algo no anda bien. Quieres contarme qué es lo que te pasa hoy? – dice directamente y sin preámbulos, dada la confianza que los años y sus diversas aventuras les han entregado.
- No lo sé. – responde directa Hande sin quitar la mirada de Mavi, la sinceridad en esta relación se vive con cada palabra.
- No lo sabes o no quieres decirme?
- No lo sé, Burcu... estoy sintiendo cosas que antes no y que me hacen pensar en lo que estoy haciendo y lo que dejo que la gente haga conmigo. – la respuesta tan honesta de Hande sorprende a Burcu, aunque se atreve a preguntar algo más
- A qué te refieres con eso?
Antes de responder Hande toma aire como queriendo concentrarse.
- Burcu, te digo que no lo sé... hace días que... no se siquiera como explicarlo, es algo tan nuevo e intenso que aún no logro entender qué es lo que me pasa. – las palabras salen de su boca de golpe, ella misma se sorprende, pero de todas maneras no le importa.
- Entonces, partamos del principio. Desde cuando te sientes así? - Burcu usando toda la empatía y cariño que tiene hacia Hande, trata de ayudarle a averiguar qué es lo que le pasa.
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El destino toca a mi puerta: Conociéndose
FanfictionEste fanfic está hecho solo para sacar estas ideas de mi mente, sin ánimo de ofender a nadie y mucho menos molestar. Todo lo escrito acá es ficción. Lo iré completando con el paso de los días, mientras pueden entretenerse con lo publicado. Dejen su...