𝟙.

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« ADVERTENCIA »

𝐄𝐬𝐭𝐚 𝐧𝐨𝐯𝐞𝐥𝐚 𝐢𝐧𝐜𝐥𝐮𝐲𝐞 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐞𝐧𝐢𝐝𝐨
𝐞𝐱𝐩𝐥í𝐜𝐢𝐭𝐨 𝐲 𝐥𝐞𝐧𝐠𝐮𝐚𝐣𝐞 𝐯𝐮𝐥𝐠𝐚𝐫.
𝐋𝐚 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚 𝐬𝐢𝐦𝐩𝐥𝐞𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐞𝐬 𝐞𝐧𝐭𝐫𝐞𝐭𝐞𝐧𝐢𝐦𝐢𝐞𝐧𝐭𝐨, 𝐞𝐧 𝐧𝐢𝐧𝐠𝐮́𝐧 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐬𝐞 𝐪𝐮𝐢𝐞𝐫𝐞 𝐝𝐚𝐧̃𝐚𝐫 𝐥𝐚 𝐢𝐦𝐚𝐠𝐞𝐧 𝐝𝐞𝐥 𝐚𝐫𝐭𝐢𝐬𝐭𝐚.


——— . ———


Dando diversas vueltas sobre la cama, restregándome sobre el colchón estiré mi cuerpo por completo intentando relajar mis músculos.

Acababa de despertarme debido a la gran fuente de luz que daba justo sobre mi cara provocando una gran molestia en mis ojos.

Sobé mis párpados con los nudillos que al cabo de un rato, cuando ya sentí las suficientes energías, abrí mis ojos. Acto que me costó bastante como supongo que a cualquier persona por las mañanas.

Miré a mi alrededor, aún asimilando que estaba en la realidad y no en mis recientes sueños. Logré observar la ventana la cual maldecía por lo bajo al no haber bajado sus persianas anoche o al menos haberles puesto la cortina por delante.

Una vez mi consciencia estaba despierta, me erguí.

— Joder... — musité llevando una mano a mi frente. — que dolor de cabeza...

Miré mi vestimenta compuesta por un vestido negro bastante escotado en forma de pico. Me gustaba debido a que era ajustado y se adaptaba a mi figura, me sentaba bastante bien.

No tenía mangas, en su lugar tenía unos tirantes.

Un detalle que amaba era el descubierto que había en la espalda.

En el suelo me pude fijar que estaban mis tacones, con bastante plataforma diría yo, del mismo color que el vestido.

A su lado habían unas cuantas botellas de alcohol.

Entonces recordé todo.

Anoche había salido de fiesta con mi mejor amiga a un antro en las afueras de Busan.

Recuerdo bailar con ella, beber unos cuantos tragos en la barra y cantar a pleno pulmón canciones de los 80's.

Pero a partir de ahí, todo estaba negro.

Tampoco sabía como había llegado hasta mi cuarto, hecho que me asustaba bastante. Pensaré que ha sido Jennie quien me trajo.

Entonces me percaté de algo, ¿qué hora era?

Giré mi cuerpo y me estiré hasta alcanzar mi móvil que descansaba sobre mi mesilla de noche, cargaba su batería conectado a la corriente mediante su cargador.

— ¡No puede ser! — las órbitas de mis ojos casi se salen de mis globos oculares. — ¡llego tarde! — lancé el aparato por los aires.

Agradezco que hubiera caído sobre la cama y no en el suelo.

Inmediatamente abrí mi armario con los nervios a mil y es que quedaban diez minutos para entrar a clases y yo recién me había levantado de mi cama.

ᴛʜᴇ ꜰᴀᴋᴇ ʟᴏᴠᴇ 𝐨𝐟 𝐚 𝐛𝐚𝐝 𝐛𝐨𝐲 || ᴊᴋ ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora