aprendiz de las armas

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Johnson.

ya paso uno o dos días desde el incidente del secuestro, o eso creo que es el tiempo que paso desde que estoy en cama.

he estado en mi habitación descansado, mi cuerpo esta débil gracias al opio, pero debería poder estar bien en poco tiempo.

William y Louis me cuidan, casi siempre estaban conmigo, Albert de vez en cuando viene a verme a la mansión y traerme uno que otro bocadillo o regalos como libros, me siento en el cielo al estar rodeada de hombres.

miraba por la ventana de vez en cuando, es una distracción que tengo mientras estoy en cama reposando, no puedo hacer nada en mi estado.

Reflexioné por mucho tiempo para llegar a mi propia conclusión después de todo este incidente.

camine despacio hasta la sala principal donde estaba William y Louis, charlando como de constumbre o realizando sus actividades diarias.

- hola... buen día.

Ambos se exaltaron cuando escucharon mi voz en la sala.

- __________ deberías estar en cama descansando, ve a tu habitación ahora mismo.

Mencionó Louis un poco enojado.

- ¿aun?

- la cantidad de opio que te dieron fue demasiada como para hacerte enfermar, por favor vuelve a tu cama, aún te vez mal para realizar actividades.

ambos se acercaron a mi, que estaba recostada sobre el marco de la puerta, querían forzarme a regresar a mi habitación.

- pero estoy bien... puedo levantarme y ayudar.

no podía apoyarme bien y casi caigo al suelo, pero Louis me sujeto, antes de caer al suelo, mis piernas se durmieron en ese momento.

- te lo dije _______________, debes volver a descansar.

Debo pensar me una excusa antes de que ambos me regañen y me regresen.

- me sentía muy sola en mi habitación, vine por que quería un poco de compañía, por favor.

Louis me levanto y me llevo al sillón que estaba al lado de William.

- si querías compañía sólo debiste llamarnos, iríamos a tu habitación a acompañarte sin problema.

Me sentía cómoda con el calor del cuerpo de Louis.

- lo siento... es que siempre estoy en mi habitación, sólo quería cambiar de ambiente un rato, no importa si es por unos minutos...

William tomo una galleta que estaba en la mesa, su expresión me dio a entender que ya me descubrió.

- ¿Cuál es tu motivo para salir de tu habitación?

- te dije que me sentía sola.

- no mientas ____________,  perfectamente que si no tenías una excusa, te regresariamos a tu habitación.

me descubrió, bueno es William, es como si me leyera la mente y supiera lo que quiero decir antes de que abra la boca.
Baje la cabeza avergonzada.

- ya no me quiero sentir inútil... Eso es todo...

- ¿otra vez con eso? no eres una inútil en nuestro plan.

- pero...

toma firmeza ____________, háblales firmemente, debo hacer que me tomen enserio, soy la más pequeña del grupo y la menos experimentada, pero debo tener voz y dar mi opinión, ya que al fin al cabo, también debo cambiar este país.

La Mano Noble Del Crimen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora