Lya Thompson

Capítulo 18

Me levanté soñolienta y cogí mi pijama, unos leggins viejos de pijama y una camiseta de manga corta de Allen blanca que le quité. Até mi cabello en un moño desordenado y dejé mis pies desnudos.

Cogí a Molly y su pijama junto su pañal nuevo. La llevé al salón y puse "Bob Esponja" en la televisión.

—Mami —rió ella viendo la tele, —Epoja —murmuró ella, una palabra nueva. Enchufé la calefacción y acosté en el sillón a Molly, miré la hora: 22:30.

Quité la ropa de Molly cuidadosamente y sonreí al ver lo inocente que se veía. Le quité su pañal sucio y limpié su parte íntima. Ella soltó una risita infantil y sonreí. Oí la puerta abrirse pero la ignoré.

—Oh si —oí una voz aguda conocida. Me volteé y eso si dolió.

Jared.

Megara.

Besándose.

Juntos.

Ellos pasaron a la habitación de Jared, nunca creí que el amor doliera tanto. Una lágrima cayó en la barriga de Molly, y ella me miró triste.

—Mami, no —dijo mi pequeña. Le puse su pijama de ositos y la abracé mientras lloraba en su diminuto hombro.

Ella se quedó dormida antes que yo. Me levanté con ella y la llevé a la cuna. Se removió en mis brazos pero la calmé enseguida. Salí de allí con un beso en la frente de Molly y apagué las luces. Me senté en el taburete de la cocina y me llegó un mensaje.

"Hola Lya, soy Elena. ¿Quieres quedar mañana a las tres de la tarde? Tengo que hablar contigo"

"Claro. Iré con Molly" - Lya.

"No, no. Molly se quedará con mi madre, iremos a patinar sobre hielo" - Elena.

"Vale. Buenas noches" - Lya.

"Okey, hasta luego" - Elena.

Apagué el móvil y oí la puerta abrirse, me volteé y Megara me vio, vino hasta mí y mostró una sonrisa triunfante.

— ¿Qué? —le pregunté fría.

—Tu novio lo hace súper bien, es más, me dijo cosas increíbles —me dijo tocándose un pecho.

— ¿Algo más? —le dije desinteresada.

—Te vas de esta casa —me informó, —Jared me lo dijo, te echará y me vendré a vivir con él, mira —me tendió su móvil y vi un mensaje con una foto.

"Megara, preciosa mañana echaré a Lya y su hija. Estoy deseando ver como vives conmigo para follarte a todo rato, adiós preciosa" - Jared.

Abrí la foto y era Jared en bóxer. Mis ojos se aguaron y mire la hora: 01:30. Una lágrima cayó.

— ¿Estas llorando, hermanita? —la miré con rabia.

— ¿No podré ser feliz nunca? —pregunté quebrada.

—A ver... ¡NO! —Gritó cómo una desquiciada, —Papá y mamá están encantados, le aman y él a ellos —me soltó con chulería. La miré con rabia y dejé que las lágrimas rodaran por mis mejillas.

—Ojalá nunca te hubieras aparecido en mi vida, solo fuiste un estorbo —me dijo empujándome, ella me ganaba por cinco años, tenía la misma edad que Jared.

—Eres una maldita puta —solté con rabia. Ella me dio una cachetada y bajé la cabeza para controlarme.

— ¿Y tú? ¡Ja! ¡Te embarazaste de una mocosa y la tuviste! Ósea... ¡Podrías haber abortado! —la miré horrorizada.