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-porque hay un sujeto en tu nevera? – Kyo tomaba una cerveza tranquilamente en mi sala a oscuras.

-como mierda entraste a mi casa? ¿Como carajo sabes dónde vivo? - instintivamente sostenía mi arma siempre lista para disparar.

-por algo me contrataste no es así? Descuida no tienes que decirme quien es el sujeto en la nevera. Pero me imagino no te caía muy bien.

-el maldito me hizo comprar una nevera solo para él.

-porque no te deshaces de el? - dice tranquilo y seguro mientras ve su cerveza, no se molesta ni a mirarme, no me tiene miedo

-porque no tengo tiempo, ni ganas, la señora que limpia si sabe obedecer mis ordenes y no se mete donde no debe.

-puedo ayudarte.

-quizá otro día. Por ahora solo quiero ir a la cama. Deberías irte.

-creí que eras más listo, jefe- su tono burlón y su patética sonrisa son molestos-, esta no es una visita social. Vengo porque tengo información de rusia. Se están reorganizando planean venganza, pero podemos adelantarnos.

-estas diciéndome que tarde semanas siguiendo a un ruso y no llegue a nada y ahora llegas tu a decirme esto. ¿No? ¿Y debo creerte?

-la lealtad es importante Kazuki, y la confianza.

-he aprendido que si quiero algo lo hago yo, el ser humano no es alguien que merezca confianza.

-sugieres que no debo confiar en ti?

-de ser necesario te dejare morir Kyo, no voy a sacrificar todo por uno más. he visto morir a muchos chicos en esto, me encariñe con algunos, incluso intente salvarlos y solo acabo mal.

-no soy nuevo en esto, soy mayor que tú, pero ahora entiendo porque no has logrado nada últimamente, impala tiene razón, solo eres un mocoso mimado. Me largo, de nada sirve que te diga lo que se si vas a tomártelo así. – da el ultimo sorbo a su cerveza y se levanta para irse

-no te vayas. – esta es la segunda vez en la noche que suplico para no quedarme solo.

-no tiene caso que me quede aquí, debería incluso renunciar, no puedo hacer equipo con alguien como tú.

-sospecho de Sam.

La confianza, la paz mental, la paciencia y la empatía son cosas que últimamente no tengo ni en mis más lejanos recuerdos, y se muy bien que me estoy arriesgando mucho al decir esto, es como comenzar una guerra contra la mafia mas poderosa, mafia que yo ayude a levantar, y de la cual ahora desconfió, sería fácil solo matar a Sam y ser el líder, pero algo muy dentro de mi lo considera la única persona a la que puedo llamar familia, el me dio algo cuando no tenia nada y peleaba en las calles por algo de dinero, no puedo acusarlo así solamente, el siempre me ha apoyado en cada una de mis tonterías, seria un malagradecido si de la nada lo matara.

-porque Sam tendría algo en contra de su mejor hombre? - sin volteara verme a unos cuantos pasos de la puerta.

-ya no le sirvo como antes, tienes razón en que he fallado, no soy el mismo y ya no puede darse el lujo de verme fallar una vez más. ja, Bu está aquí en mi nueva nevera, y antes de morir me dijo que Sam quería matarme y ofreció una recompensa por mi cabeza, hasta ahora nadie mas lo ha intentado, solo el así que no se si creerle, pero también considero que mi reputación es lo suficientemente diciente como para que cualquier novato venga a intentarlo.

-vamos a solucionarlo jefe. – voltea lentamente y se acerca a mí, me toma del hombro y por un momento recuerdo mi infancia a lado de los demás niños del barrio, pero al final del día la mierda siempre se repite, una y otra vez, volvemos a lo mismo, y eso me mantiene a la defensiva. Volver a confiar en alguien seria muy estúpido de mi parte, ni siquiera puedo confiar en Sam ahora.

Terminare igual, solo, traicionado y luchando por sobrevivir, una y otra vez, me arrepiento de contarle a impala sobre mis gustos, que clase de asesino soy si no he conseguido matar mi parte humana. Es estúpido de mi parte seguir jugando a ser el mejor, soy el mejor en nada, mejor siendo nada, y he estado siéndolo durante mucho tiempo yo solo, cuando creí que podía bajar la guardia la maldita lo arruino y todo se fue al carajo, lo único claro que tengo ahora es que Adi no puede empezar una vida a su lado, no importa si debo matarlo, y ya se quiénes van a ayudarme...

Mi mente piensa un momento, primero Adi, puedo usar a Kyo e Impala ensuciarles las manos tanto que dependan de mí, después los rusos con la información nueva y por ultimo decidir qué hacer con Sam. 

otra tediosa noche en ParísDonde viven las historias. Descúbrelo ahora