A CUALQUIER PRECIO | Caché |

CAPITULO 2 | Fantasías

Era una tontería. Ser quien quisiera ser era una ilusión, una fantasía que nunca se convertiría en realidad. Era imposible conseguir nada más que desgracia viviendo en el fin del mundo, cosiendo telas para poder comer, sostener a su padre enfermo y sin la ayuda de un esposo o hermano mayor que las protegiera. Que pagara la comida, las medicinas, la ropa y mantener el techo sobre sus cabezas, asi como se supone debiera ser según la sociedad tradicionalista, era tarea sumamente difícil, antes seguramente un imposible. Pero ella lograría su objetivo a cualquier precio.

En aquella ciudad lejana, donde las personas se resignaban a que las explotasen, no por elección sino por ignorancia, en esas fabricas (zonas industriales "francas") de ropa y zapatos. Nadie en el pueblo hacía otra cosa que no fuera trabajar para las empresas de los "Calle", nadie se esforzaba por aprender otra cosa que no fuera coser, pegar cremalleras y botones o pegar la suelas a los zapatos. Quien hacía otra cosa se la pasaba criticando o adulando a los dueños de la fábrica, con el fin de ser notados y algún día ser tomados en cuenta para un puesto de "encargado" Hacer conversación, crear historias y fantasías acompañadas de ron en la cantina hacían el día a día. Para los hombres, desahogarse de esta manera parecía ser la medicina de todos sus males. Para las mujeres no había otra cosas mas que contar algún chisme, cuidar la casa y los hijos.

Poché cocía todo el día para mantener a Juan Carlos, su padre enferm y a Vale, la hermana menor, todavía no cumplía los catorse años. La porquería de casa en que vivían, se caía a pedazos, era tan vieja como los antepasados de una familia indígena. Ella siempre trabajando para poder subsistir, con el ridículo sueldo que no le daba para nada. Apenas alcanzaba para comprar las medicinas del tratamiento para la enfermedad de los riñones de Juan Carlos, las tres comidas y algún vestido sencillo cada fin de año para alguna de las dos.

Para Poché esa noche de otoño, era como si volviera a nacer nuevamente a una vida llena de emociones y todas las cosas que le habían faltado durante sus veinte años. "De ésta noche en adelante comenzarás a borrar tu pasado María José Garzón Guzman, comenzarás a tener todo lo que no has tenido antes y no echarás atrás ni a tomar impulso, ni siquiera a soñar un poco... tu sueño es seguir adelante y conquistar el mundo"

Continurá...