En el corazón se pertenece [Kaylor]

Capítulo 50

No es una sorpresa que tu padre es un imbécil, el nunca te ha tratado bien, tal vez te haya procurado en lo económico, pero no hablemos de cariño, el siempre tan controlador y manipulador. Obviamente las apariencias son muy importantes cuando eres un gran empresario, así que cuando empezaste crecer y tú época rebelde fue inminente el trató de corregir tu comportamiento, trató de imponerse y hacer que su hija se mantuviera a raya.

Pero eres Taylor Swift, eso jamás hubiera sido posible, escapabas, llegabas tarde, y empezaste a formar tus propias opiniones, pero eso en tu casa no vale de nada.

El jamás aprobó a las amistades con las que salías, de echo las culpaba por tu rebeldía pero no era ese el caso, simplemente eras una niña que quería vivir su adolescencia, pero no pudo con eso hasta tal punto. El problema es que cuando dejaste a tu último novio, Harry, decidiste parar de salir con chicos, estabas enfocada en otras metas, querías ir a la escuela de arte saliendo de la preparatoria, y podría decirse que empezaste a madurar.

Lo dejaste porque no lo amabas suficiente, eso me dijiste, el tampoco parecía ir enserio así que quedaron como amigos y todo terminó bien. Hasta donde sé. Estabas llena de ilusiones, te aceptaron en la escuela de arte, pero tu padre tenía otros planes.

El arregló que fueras a la facultad de Economía, no te dejó asistir a la escuela que habías elegido, y eso es lo único que le agradezco porque ahí te conocí.

A diferencia de ti yo sí estaba por voluntad propia en la carrera de economía, siempre quise trabajar junto con mi padre y un día hacerme cargo de su empresa. Mi padre es presidente de Kloss Capital. El tuyo es dueño de la multireconocida firma S&S Inc.

Tu padre tiene más dinero que el mío y más influencias y más poder. O al menos de eso presume siempre. Ellos tenían intención de entablar una relación de negocios, en especial mi padre que pasaba por momentos económicos difíciles.

Mi madre se divorcio de él luego de que no superará la depresión que le vino con la muerte de mi abuela.

También estuve triste pero ella siendo esposa y madre no podía solo descuidar sus deberes. Yo ya estaba grande, no era una niña podía valerme por mí misma pero mi padre quería que volviera a ser la misma. La presionó para que buscará ayuda, y en lugar de mejorar simplemente concluyó que era mejor irse.

No le guardo rencor, o al menos no lo hacía en ese momento. Pero después tuve que pasar por todo esto contigo y me sentía sola.

Mi padre tampoco la culpó, aunque el pagaba la mayoría de los gastos médicos de mi abuela y a causa de eso tenía muchas deudas.

Justo por aquel tiempo te conocí, entrando a la universidad, no podría escribirte como fue que nos enamoramos porque tardaría mucho más, pero eventualmente lo hicimos, y aunque trataste o tratamos de ser discretas tu padre terminó por enterarse.

Y no es sorpresa que es una persona intolerante y homofóbica. Jamás estuvo de acuerdo con que tú fueras bisexual, y su enojo fue tal que canceló el trató que tenía con mi padre, el negocio se vino abajo y estuvimos a punto de quebrar. Pero a tu padre no le importó, arremetió contra el mío, poniendo a grandes inversionistas en su contra y queriendo que sus propios empleados le dieran la espalda.

Mantuvimos la relación en secreto por un año y medio, pero después cuando se enteró de nuevo, fue cuando se desató todo esto que te cuento. Intentó sacarte de la escuela para que no nos viéramos más, te mandaría a una escuela privada en el extranjero eso me contaste, pero jamás dejaste que te intimidára, lo convenciste de que lo nuestro se había acabado y que irías a otra escuela. Pero pronto se dio cuenta de que la escuela a la que querías ir era la de arte y no lo volvió a permitir.

El quería que estudiaras economía para que tuvieras un lugar en alguna de sus empresas. Lo cual jamás entendiste, porque quería eso si no te tenía el mínimo aprecio.

Llegaste a la conclusión de que solo lo hacía para hacerte la vida miserable. En fin tu te negaste a estudiar economía, él se enfadó por su puesto, pero lo hablamos y estuve de acuerdo en que no podías estar haciendo las cosas sólo para darle buen parecer, si no podías estudiar arte no ibas a estudiar, así que dejaste la escuela, y yo te extrañe ese último año.

Pero aún seguimos viéndonos, hasta que tu padre se dio cuenta de que realmente jamás lo dejamos. Hizo que me expulsaran de la escuela, y debo admitir que estaba furiosa y frustrada, era mi último año, y a diferencia de ti yo sí estaba entusiasmada con la carera.

Aunque no debí dejar que eso influyera en nuestra relación.

A raíz de eso tu lo enfrentaste, le dijiste la verdad, le dijiste que podría tratar de joder tu vida pero que no te ibas a dejar pisotear, lo enfrentaste más furiosa por lo que me había hecho a mi que por lo que sufrías a causa de él, le dijiste que me amabas, que no pensabas dejarme solo porque él no lo aceptaba, fue muy valiente Taylor y también muy estúpido, si hubiera sabido que harías eso no te lo hubiera permitido.

Porque en vez de entender de los que hablabas, tu padre te golpeó, y eso no lo soporté, esa noche fui a buscarte porque me lo pediste y casi me golpea a mi también. Los insultos no paraban de emanar de su boca, y trataba de evitar que nos fuéramos. Pero fuimos más rápidas, sacaste un par de cosas de tu casa para poder quedarte en la mía.

No parecía grave, no te quebró nada físicamente, no quisiste ir al hospital, te dije que lo denunciaras pero apesar de todo no creías que fuera una posibilidad. Yo no sabía si era porque en el fondo le tenías un mínimo de respeto como tú padre o porque sabías que no serviría de nada.

Te di alojo, te amaba y no pensé en las consecuencias, también deseaba salvarte y ayudarte. Pero tu padre sabía que estabas ahí, llegó con policías al día siguiente y acusó a mi padre de haberte golpeado.

Le atribuyeron los golpes que tenías a él, te encontraron en mi casa golpeada y alterada, y aunque gritaste que no era cierto tu padre infundía demasiado miedo en ambas. Me pediste perdón pero yo entendí, él te había amenazado con algo más grande y decidiste ceder lo entendí, y yo solo quería mi padre regresará a casa.

Tu padre cedió a retirar los cargos solo si aceptabas olvidarte de mi y empezar una relación con algún hijo de algún socio suyo. Dijiste que sí.

Mi padre tenía una orden de restricción, así que era muy arriesgado que nos viéramos porque podría tu padre poner una queja en cuanto le dieramos un motivo.

Así que eso fue la gota que derramó el vaso. Tu ya no estabas a gusto en tu casa, no querías ya estar ahí más. Yo te dije que no podías solo irte, no podías quedarte ya en mi casa. Fuimos más precavidas, nos veíamos en el lago cada semana. Íbamos por separado así no corríamos el riesgo de que nos vieran y avisarán a tu padre. Yo en mi auto y tú en el de Matt. Tu padre no era tan idiota, jamás te permitió tener auto propio.

Hablaste varias veces sobre huir, lo intentaste sin mi, pero siempre tu padre encontraba donde estabas. Una vez en casa de Selena, otra vez en un hotel. El volvió a amenazar a mi padre y a mi, creía que estábamos detrás de tus desiciones pero no fue así.

Yo lamento haber tenido miedo. Lamento no haberte apoyado. Te pedí que dejaras de hacer aquello porque no estabas pensando en como eso le afectaba a mi familia. Fui insensible, tenía miedo, no debí juzgarte de aquella manera, yo sabía cómo sufrías. Yo lo sabía mejor que nadie.

Pero apesar de todo quería estar contigo.