La Nueva Generación

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El tiempo paso de prisa sin darse cuenta ya había nuevos retoños floreciendo los chicos Jiang eran felices cada día sus vidas por fin estaban en orden el amor les sonreía.

Yianli no cabía en su cuerpo de la felicidad sus dos hijos Jin Ling y Meiling alegraban sus vidas a cada minuto era verdad que habían cambiado las cosas casi no tenían tiempo de pareja pero ello sabían arreglárselas el gran paso real no podría quedarse con las ganas de tener a su fragante loto entre sus brazos.

Xichen era el más radiante de todos con la llegada de su primogénito Lan JingYi se sentía en el cielo su sonrisa era genuina y nadie se la borraba el amor de su vida le había dado la felicidad que nunca había tenido su lindo gruñón era un mar de amores cuando estaban solos y el se desvivia por el sin su loto morado el no podría seguir.

Pero Wei aun no conocía ese regocijo aun no tenía a su amado hijo entre sus manos, anhelaba tenerlo pero seria muy paciente cosa que el no era pero por el bienestar de su rábanito era capaz de todo.

Lan wangji lo complacía en todo y era muy coherente con sus caprichos debía de reconocer que el Lan se había armado de una paciencia de mil muros para aguantarlo porque con sus cambios de humor por las hormonas estaba insufrible y el lo sabía.

Pero para el Lan era la etapa más feliz de su vida no importaba las rabietas de su lindo esposo ni los pucheros ni los dramas que le formaba de vez en cuando que lo votaba de la alcoba por cualquier mal entendido para después ir llorando y dormir a su lado volvería a repetir cada una de las cosas que paso por sentir lo mismo de nuevo no cambiaría nada.

Estaban cenando plácidamente trataba de que estas últimas semanas sean inolvidables para Wei Wuxian porque después todo cambiaría lo sabia tendrían muy poco tiempo para compartir juntos porque ahora serían tres su familia crecía y su felicidad también Lan Wangji se sentía el ser más afortunado sobre la faz de la tierra.

Los abuelos estaban chochos con sus nietos los consentian a más no poder ni nadie podía replicar porque sabían el carácter de ellos sus bebes como ellos les decían eran intocables sino se atenian a las consecuencias.

Wei Wuxian y Lan Wangji regresaban de su cena el segundo cada día más enamorado del ser que tenía al lado no podía describir con palabras lo feliz que lo hacía y que los cielos lo hubieran premiado con este regalo de ser padre con el ángel que llego a su vida.

Si se ponía a recordar el inicio de su relación siempre le daba una melancolía que apretaba su corazón de acordarse cuando duró, estúpido y maldito había sido con su esposo la humillación que le hizo pasar en más de una ocasión y la denigrante aventura que había tenido y que casi hace perder al amor de su vida.

No podía describir el dolor punzante en su corazón, sentía que le debía todo al ser que iluminaba sus días con su sonrisa que alegraba su vida con cada travesura y el único que encendía su cuerpo con solo una caricia sentía que le debía todo y al mismo tiempo que con nada en el mundo se lo pagaría.

Amaba tanto a ese hombre y lo había hecho sufrir tanto que nunca podría perdonarse sumido tanto en sus pensamientos que no se dio cuenta en cuando estaban llegando a su casa lo bueno es que había pedido al chófer que los llevar y recogiera sino era impensable saber como llegarían.

Wei Wuxian  sabia que algo rondaba la cabeza de su muy callado esposo y no sería nada bueno si veía rastros de tristeza en esa hermosa mirada color oro.

Amor te pasa algo, tienes algún problema en la empresa o algo más te agobia pregunto Wei Wuxian algo ansioso no le gustaba ver a su hombre así.

No es nada corazón solo unos recuerdos que atormentan mi mente pero nada de importancia, lo abrazo como si su vida dependiera de ello lo beso sumamente apasionado y acaricio su cuerpo con devoción quería transmitirle con cada poro de su cuerpo que el le pertenecía y que daría su vida si el se lo pidiera no había nada en el mundo que pudiera separarlo de él.

Wei Wuxian jadeo al terminar el beso se sonrojo mucho y su pecho subía y bajaba de una manera algo frenetica y se lo veía sensual aun con esa pan siga tan abultada.

Lan Wangji se alteró al verlo así su cordura no duraba nada frente a este joven el era su perdición pero tenía que controlarse su pequeño esposo estaba en sus últimas semanas y debía de cuidarlo más.

Pero Wei Wuxian no pensaba lo mismo su esposo lo encendía y maldecia a las hormonas el embarazo lo había hecho muy fogoso y lo necesitaba siempre con el sus besos lo exitaban de sobremanera y lo calentaban como el infierno mismo lo deseaba claro que si y su hermoso vientre no le impediría comerse ese manjar que tenía por esposo su bebé lo entendería.

Sin previo aviso lo tomo del cuello y lo beso apremiante, ansioso, cansado y exitado posó sus manos en el pecho de su amado esposo para empezar a desabrochar su camisa cuando sentío unas manos tomar sus muñecas.

Lan Wangji metió su rostro en el hueco del cuello de Wei Wuxian tratando de regular su respiración hablo contra la piel del otro, no podemos hacerlo podemos hacerle daño al bebé y no me lo perdonaría jamas.

Con esas palabras Wei Wuxian se enojo y solo se alejo y se dirigió a su cuarto cerrando la puerta mejor dicho tirándola en el proceso.

Suspiro ya sabia de antemano que hoy dormirá en el cuarto de visita su lindo esposo no le permitiría la entrada y tendría que armarse de paciencia para el discurso de media noche que le diría pero un así amaba a su bipolar esposo.

SIEMPRE FUISTE TUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora