being my boyfriend. [J.JK] #2

Capítulo 20: Eres tan fuerte, pequeña.

La imagen de Jungkook apoyado en la pared, de brazos cruzados y mirándome con una sonrisa me dejó helada. Me miraba con ternura, como si fuese la persona más adorable del mundo.

-¿Lo has...?-pregunté aún en el teléfono.

-Más o menos.-respondió en un tono burlón.

-¿Desde hace cuanto estás ahí?-cuestioné de nuevo nerviosa.

-Digamos que estoy muy contento de que ya tengan fecha para el nacimiento de tu primo.-soltó una risita.

Tapé mi cara con vergüenza mientras él solo reía.

-¿Qué ha pasado?-dijo mi madre perdida al teléfono.-¿Con quién hablas?

-Qué vergüenza.-dije sonrojada.-¿Has...escuchado a mi madre decir que si tenemos...planes...?-cuestioné asustada.

-Tal vez.-dijo con una sonrisa provocativa y burlona.

Mi cara ardía como si hubiese estado a cuarenta grados bajo el sol.
Él se acercó a mi sin dejar de sonreír y me abrazó, pero intenté zafarme.

-¡Quita! ¡No deberías haber escuchado nada, kook!-dije avergonzada, tratando de alejarme, incluso si sabía que él era mil veces más fuerte que yo.

Comenzó a dar besos en mi cabeza para calmarme.
Por un momento, dejé de negarme y correspondí a su abrazo. Aún tenía a mi madre en el teléfono, quien se había echado a reír tras escuchar los besos que me había dado.

-¡Son tan tiernos!-dijo ella cariñosamente.

-No es tierno. Ha escuchado toda la conversación, mamá.-dije separándome de él y mirándole con mala cara.-¿Te puedo llamar luego o mañana? Dime que tienes algo de tiempo.-pregunté asustada de su respuesta.

-No puedo, cariño, sabes que no tengo tiempo. Trataré de buscar un hueco pronto, ¿vale?-afirmó ella.-Te quiero mucho, cielo. Recuerda lo que hemos hablado, eres preciosa y, quiero que sepas que estoy muy orgullosa de ti. Los abuelos dicen que te quieren mucho y que te echan mucho de menos, los tíos también y tú prima pequeña aún sigue preguntando cuando vas a volver.-dijo ella con una tierna risita.-Te amamos. Buscaremos la manera de que estes pronto aquí, te lo prometo.

De nuevo, todas aquellas lágrimas que con la inesperada visita de Jungkook habían desaparecido, volvieron.
Echaba tanto de menos a mi familia. Estar lejos de ellos era muy difícil para mi, incluso si después de cinco años había encontrado la manera de acostumbrarme a no verlos.
Sentí los brazos de Jungkook rodear mi cuerpo y me dio un beso en la frente.

-De acuerdo, mamá. Dile a todos que también les echo mucho menos y dile a los abuelos que dentro de muy poco iré a comer con ellos de nuevo, ¿vale? Y a la pequeña dile que volveré antes de que se de cuenta, asegúrate de que no crezca muy rápido, por favor.-dije sonriendo entre lágrimas.-Te quiero mucho. De verdad que sí.-aseguré.

Terminamos de despedirnos y colgué el teléfono.
Lloré en el pecho de Jungkook, tratando de sacar todo aquello que llevaba dentro. Él acariciaba mi espalda y me miraba apenado. Me agarró en brazos y me sentó sobre él en el sofá. Froté mis ojos para secar aquellas lágrimas y le miré, con la barbilla aún temblando.

-Los echo mucho de menos, kook.-dije entre sollozos.

-Lo sé, princesa.-asintió él, abrazándome.

Recosté mi cabeza en su cuello.
Mi cuerpo quedó sobre el suyo, sintiendo la calidez y la sensación de estar como en casa. Estos momentos eran los que me hacían darme cuenta de que era el amor de mi vida.

-Eres tan fuerte, pequeña.-dijo él, casi en susurro.

-No, no lo soy. Ojalá pudiese serlo.-negué con arrepentimiento.