Gerard necesita dinero y está abierto a opciones para ganarlo, su mejor amiga decide ayudarlo creando una cuenta en un sitio muy inusual, con gente de gustos extraños... Allí conoce a Frank.
TRIGGER WARNING: Esta historia no busca idealizar ni glori...
Primero: Ya que no todos nos siguen entonces dejamos el anuncio aquí; nos vamos a tomar un pequeño receso de vacaciones y en enero volveremos. Publicamos este capítulo hoy como regalo de navidad para ustedes<3 felis navidad besitos
Segundo: No me gusta especificar el outfit pero es importante que sepan el outfit de Gerard en este capítulo porque es muy específico:
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Tercero: ESCUCHEN LA CANCIÓN. Mejora totalmente la experiencia mientras leen uwu (o sea no es obligatorio, pero es recomendación)
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«Sabor rojo, siento curiosidad, cariño
Sabe como una fresa derritiéndose cuando lo muerdo»
Los calcetines blancos de Gerard eran muy fuera de lugar viendo que era un día caluroso, pero aun así los tenía puestos mientras bajaba las escaleras frías al tacto, escuchando cómo Frank ya estaba despierto.
Él en realidad estaba despierto desde hace un tiempo, sólo que aún no había salido; se peinó y lavó en general, ahora bajaba a hacerse desayuno en pijama.
El mayor estaba en el sillón con su guitarra en mano, estaba tocando algo como si intentase descubrir una nota, no sabía muy bien, él se dedicaba a hacer ropa, no a tocar instrumentos. La pantalla del televisor está en las noticias, en volumen bajo, sin intenciones de molestar a Frank.
— Buenos días. — Dice alegremente. Mientras va a la cocina y saca una taza desde los platos secos, es la que Frank ha ocupado antes, y aprovecha de sacar el plato para su tostada. Su cabello está húmedo, delatando que tomó una ducha antes de desayunar.
— Buenos días. — Dice Frank dejando su guitarra a un lado y se levanta, acercándose al mostrador de la cocina. El estilo abierto de la casa de Frank permitía que se viese amplio y elegante. — Alguien amaneció de muy buen humor. — Agrega divertido, apoyando su parte superior en el mostrador, cruzándose de brazos.
— Bueno, hoy amanecí motivado. No me suele encantar el clima tan caluroso pero el día está precioso, entonces estuve viendo un poco mi ventana y vi a muchos pajaritos y tienen un nido en el árbol que da a mi ventana y me puso de buen humor ver a pajaritos chiquititos. — Dice tomando un pan que Frank había tostado y poniéndole mermelada encima.
— Ya veo que sí. — Responde con su tono sarcástico, viendo cómo Gerard toma el café que él hizo hace un rato y lo sirve en la taza, probándolo antes de ponerle un poco de azúcar.
— No sé cómo puedes tomar esto sin azúcar. — Dice asqueado mientras revuelve el líquido con su cuchara.
— ¿Qué tiene de malo mi café? Es riquísimo. — Se muestra incrédulo.
