Continuabas viendo el gran bulto en los pantalones de Dabi. Éste no hablaba y evitaba verte a los ojos.
"Así que así es la situación" le dijiste con cara de fascinación. Dabi estaba rojo de la vergüenza.
"No me digas que el gran y poderoso Dabi es un maldito masoquista" empezaste a carcajear.
En verdad quién se lo esperaría. Tenía el porte de ser totalmente lo contrario; una gran mentira que le mostraba a los demás. Sentiste algo que jamás habías sentido antes; una llama que encendía todo tu ser. Despreciar a Dabi y que éste se mostrara tan vulnerable ante tí te hizo sentir...poderosa.
"¿Qué esperas que haga con eso?" señalaste a su bulto.
"Me duele, quiero sacarlo; ¿me...dejas sacarlo?" dijo tartamudeando
Empezaste a reír de nuevo. Se veía increíblemente patético. ¿Qué deberías hacer? No estabas acostumbrada a ese sentimiento; pensar en que podrías dominar a Dabi te hacía olvidarte de tus tragedias. Quizás con otra persona no fuera lo mismo pero en verdad sentías que Dabi merecía ser castigado por ser un pedazo de mierda. No es como si fueras una santurrona, sabías exactamente lo que estaba pasando.
"¿Crees que después de que estuvieras amenazando por días, haber quemado mi casa y haber potencialmente herido a Aizawa te merezcas eso?" no estabas mintiendo en absoluto.
"N-no," te dijo "puedes castigarme." te sonrojaste.
Sentiste mariposas bajar por tu cuerpo al ver que Dabi prácticamente te rogaba que lo castigaras. Estabas enojada; recordaste lo bien que sintió esa vez que le diste una bofetada. Pensaste si no estarías haciendo exáctamente lo que él quiere si cedías. "Al demonio con eso." pensaste, total ya estabas atrapada aquí, jugar un poco con Dabi quizás fuera lo mejor.
"Bien, te haré un pequeño favor por haberme traído comida deliciosa hace rato." dijiste.
Caminaste hacia donde estaba él postrado y te quitaste el zapato. Tu calcetín era de...sorpresa... Miraculous (Ladybug va a presenciar cosas traumáticas). Empezaste a acariciar el bulto con el pie.
"No mereces más que esto" le dijiste.
Dabi empezó a gemir. Su bulto increíblemente se hizo más grande al ser rozado por tu pie. Estabas segura que le dolía no poder sacarlo pero que a la vez le gustaba que lo tocaras. Viste que Dabi tenía una expresión peculiar en su rostro; en verdad le dolía. Su cara era muy graciosa así que te reíste.
"Te ves realmente patético ahora mismo" le dijiste y empezaste a acariciar el bulto con más fuerza. No salieron más que ruidos graciosos de la boca del villano.
"Déjame sacarlo porfavor, v-voy a correrme en los pantalones" te suplicó.
Le sonreíste, eso es exactamente lo que querías. Seguiste acariciándolo a pesar de los súplicas que te daba. Te sentías como una reina sádica que castigaba a los hombres malos; en verdad se sentía tan genial que también te excitaba.
"M-me voy a venir...MMmhm" gemió con pequeñas lágrimas en los ojos.
El villano a quien todos le temían se encontraba temblando del placer a tus pies, con una mancha enorme de semen en su pantalón. Tú le hiciste eso; jamás podrías ser la misma. Era como si te hubieras inyectado heroína por primera vez. Haber presenciado eso te hizo tener un placer casi orgásmico.
"Demonios, eres una bestia, para ser una niña tonta..."
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¿En qué momento me poseyó el Eros? +18 (Aizawa, Dabi y tú)
FanfictionDentro del mundo de My Hero Academia, eres una chica impulsiva de 23 años que hace un mes dejó la universidad. Un día te estrellas con un personaje misterioso en la calle y tu vida cambia para siempre. Después de unos Takis Fuego y muchos gatitos t...