¿En qué momento me poseyó el Eros? +18 (Aizawa, Dabi y tú)

83. Héroes y villanos

"Este es el problema con los héroes, son tan orgullosos que confiar en a quien ellos denominan villano puede solamente significar una molestia en sus vidas acomplejadas." dijo Shigaraki "Y aún así," dijo volteando a ver a Dabi, "caíste tan bajo como para buscar su ayuda. Ciertamente nunca me imagine que el mismo Dabi tan antisocial y retorcido podría escapar como cuento de hadas con su princesa"

El villano se sentó y se puso cómodo en los sillones.

"Y sin embargo, su princesa estaba revolcándose con otro hombre jojo, esa parte no la escriben en los cuentos." dijo lanzando una risa falsa. "Esta princesa en otros cuentos más bien sería otra palabra con p...me pregunto cuál será..."

"¡PUTA!" gritó Toga.

Shigaraki volteó los ojos "No es un concurso de adivinanzas."

Toga frunció los labios.

"Bien, como ya había dicho, no entiendo qué tiene esta persona tan aburrida como para que los traiga como pendejos haciendo concursos para ganársela. ¿Qué tipo de premio es ella? Apenas uno de consolación, ese que nadie quiere. En verdad me dan asco. " continuó Shigaraki.

"Bien, entonces todos estos días mientras los buscaba, pensé en qué hacer: matar a la puta; matarla a ella y a Eraser, matar a Dabi por traidor; matar a Eraser y a Dabi y dejar vivir a la puta para que sufra; matarlos a los 3." dijo rascándose un poco el cuello. "Sin embargo, hoy me siento misericordioso y voy a dejar que Dabi los mate a ambos para que se olvide de estas tonterías y regrese a trabajar..."

Dabi puso una cara de asco.

"Sabes muy bien que no voy a matarla Shigaraki. A Eraser puedes hacer lo que quieras pero a ella no. Te lo ruego, y sabes que no soy un hombre que ruega." dijo Dabi aceleradamente.

"Precisamente por eso ella tiene que desaparecer. Eres un asco queriendo rogar. Te mataría si no fuera por tu increíble habilidad que es de gran utilidad para mis planes." le respondió amargamente.

"Entonces regreso contigo y me olvido de ella. Soy bueno en lo que hago y no planeaba nunca dejar la Liga y lo sabes. No entiendo cuál es tu obsesión con ella. Es sólo por Eraser? Mátalo entonces para que ella deje de ser un puente peligroso." dijo Dabi fríamente.

"Debes estar bromeando. ¿Crees que ella estará a salvo si ya no estoy en el plano? Tu sabes más que nadie que no se puede confiar en los villanos." le respondió Aizawa. "Además si crees que me voy a dejar matar y dejarla en sus garras estás muy equivocado." dijo dándote un apretón.

Tú, francamente, estabas sin palabras viendo todo el intercambio de planes en los cuales terminabas muerta en casi todos.

"¡Dabi! Sabes lo que tienes que hacer demonios!" le gritó Aizawa.

Dabi te volteó a ver con una cara inmensamente triste.

"Sabía que este concurso iba demasiado en mi favor." dijo sarcásticamente.

"Llévatela lejos..." escuchaste que dijo Dabi en la voz más seria que le habías escuchado nunca. Finalmente, te volteó a ver una vez más y te guiñó el ojo.

Momentos después, la historia finalmente se repitió. Dabi lanzó sus ardientes llamas en dirección a los sillones de velvet. El fuego se extendió tan rápido que no pudiste procesar bien qué exactamente pasaba y, al parecer, era el caso también del enemigo pues el sorpresivo ataque de Dabi causó una pequeña distracción en el enemigo, creando una ventana de oportunidad para escapar.

Aizawa te jaló hacia la puerta, logrando salir. Corriendo a toda velocidad, dejaron un creciente fuego absorber más y más el edificio. En la calle, los pedestrianos ya hablaban a las autoridades.  Y tú, sin palabras, corrías a lado de Aizawa. Tu mente, aún en shock, estuvo casi inconsciente casi todo el tramo. Sólo veías como las llamas aumentaban más y más, pero se hacían más y más pequeñas entre más lejos estabas de ellas.

Parecía que nunca ibas a dejar de correr, hasta que de repente lo hiciste. Sin embargo, Aizawa tomó su celular y habló con alguien desconocido. Mientras tu estabas en un estado de ensueño. Este te dijo que entraras en la cafetería que estaba frente a ustedes y él se fue.

Una vez que te sentaste en la cafetería, empezaron a llegar los recuerdos del suceso; Podías recordar el dolor en la expresión de Dabi. ¿Qué pasaría con él ahora? Tu corazón empezó a sentirse duro. Te dieron unas ganas enormes de llorar debido a la impotencia que sentías. No pudiste hacer nada para protegerte de nuevo...de nuevo habías fracasado.

Esta era la vida de los héroes y los villanos.

No había punto en el cual se conectaran, excepto tu. Sin embargo, estos dos mundos seguían siendo incompatibles.

Te quedaste en la cafetería mientras escuchabas sirenas ir en dirección al edificio que habías estado llamando hogar junto a esos dos hombres que habían girado tu vida a un ángulo tan radical. Sin darte cuenta, de repente notaste gotas en la mesa; tus lágrimas.

No habías podido mostrar un gramo de emoción por cómo habían pasado las cosas y la adrenalina fluyendo por tus venas sólo buscaban el escape y la seguridad.

Pasaron unas cuantas horas y muchos cafés después para que finalmente la conmoción se acabara. Esperaste y esperaste; se hizo tarde y el cielo oscureció. Nadie había ido por ti.

Así que así es... pensaste. Ni siquiera pude decirles...

Tomaste tu celular y llamaste un taxi. El destino: desconocido.