Los Desahuciados

8

“Hablamos luego=Vete a la mierda”

Seth:

Eran pasadas las 10 p.m. cuando llegué a casa, todo estaba oscuro, solo habían algunas lámparas encendidas, alumbrando con su tenue luz la gran sala y las escaleras.

Había estado en casa de Daisy, una amiga, todo el rato, pero sabía que debía volver a casa antes de la 1 a.m., y había llegado a tiempo. No habría reclamos a la mañana siguiente. Crucé la sala de estar con sumo cuidado de no tirar nada, cuando llegué al pie de las escaleras, me percaté de que ahí se encontraba Ellie, con la cabeza hundida entre sus rodillas, su pelo azabache le cubría las piernas enfundadas en unos pantalones de pijama con estrellitas doradas. Su imagen daba a entender que no se encontraba del todo bien.

Arqueé una ceja hacía ella.

-¿Elle? ¿Releíste la muerte de Mila o qué?-indagué, algo sarcástico. Sí, leía en Wattpad, eso era culpa de ella y de Beth.

-No. Algo peor. -Respondió sin levantar la cabeza del hueco en sus rodillas. Asentí, pensativo. Era claro que algo le pasaba, usualmente ella se mostraba enérgica y feliz, y ahora se veía...¿desahuciada?

Me acerqué sigilosamente a ella, y me senté a su lado. No levantó la cabeza ni un segundo.

-¿Vas a contarme?

-Sí. -Su voz se escuchaba amortiguada, y tenía un temblor que apenas se podía detectar. Espere un par de minutos a qué hablará, pero no lo hizo.

Cuando decidí romper con el silencio, Ellie levantó la cabeza de golpe, giró en mi dirección y me dio la cara. No me esperaba lo que vi. Sus ojos de un negros intenso estaban rojos e hinchados, era evidente que había estado llorando, sus labios formaban una sonrisa triste, el inferior temblaba, cómo si en cualquier momento fuese a partir en llanto. Tenía las mejillas secas, era probable que se hubiese limpiado las lágrimas, unos rizos se le pegaban al rostro. No se veía muy bien.

No me había fijado en que tenía su teléfono entre las manos hasta que me lo tendió, yo lo tomé confundido. Odiaba cuándo Ellie hacía este tipo de cosas, que no hablaba y daba señales confusas, o qué hablaba a medias con la intención de que averiguara a lo que se refería. En algo en que nos parecíamos mi hermanastra y yo, era que nos gustaban las cosas claras y sin rodeos, aunque a veces a ella parecía olvidársele.

La pantalla se su teléfono nos dio más iluminación, bajé la mirada hasta él y noté que estaba dentro de un chat en WhatsApp. Al leer el contacto, tuve una idea de qué-más bien, de quién-se trataba el asunto.

-¿Quién es Hottie? -pregunté, solo para estar seguro.

-¿Tu quién crees qué es?

Sí, era quién yo creía.

Así que, fijé mi vista en la pantalla y comencé a leer algo que ya esperaba.

14:10
Ellie: Hola

14:13
Hottie💙: Hola

14:14
Ellie: Qué tal estás?

14:15
Él: Bien

14:16
Ellie: Me alegro por ti ;)

14:17
Él: Gracias

14:18
Ellie: Oye, te ocurre algo?