“El final de la noche”
Alec:10:34 p.m.
—Te vez sexy con eso—alcé las cejas en un gesto coqueto en dirección a Liv. Ella se río y negó con la cabeza.
Quizá teníamos una hora de haber llegado, al menos yo. Llegué con mi hermana, su disfraz era muy tierno. Liv llegó después, y desde ese momento me quedé con ella. Estuvimos por toda la casa, nos encontramos con unos amigos de nuestro curso, fue divertido hablar con ellos, me sorprendió ver a Clover, aunque parecía que Ellie había invitado a medio mundo.
—Tus nefastos intentos de seducirme para llevarme a la cama me dan gracia—se burló, tomando un trago de su vaso. Puse mi mano en el pecho dramáticamente.
Debía confesar que, estaba algo ebrio. No mucho, al menos, no por ahora.
—Yo no estoy haciendo tal cosa, por favor, Olivia—negué, fingiendo demencia. El vaso de plástico rojo en mis manos, estaba casi vacío, así que solo me estiré un poco y alcancé la botella de whisky.
Su ceja delgada se alzó por encima de la máscara negra igual a la mía.
—Claro—alargó la o de la palabra, sin creerme nada. Sonreí coquetamente, recostándome ligeramente sobre su cuerpo.
—¿Eso significa que no quieres ir a la cama?—hice un bailecito con mis cejas. Ella giró los ojos.
—No.
Solté un bufido.
—¿Por qué no? Si soy muy bueno en lo que hago, en espacial con mis trabajitos con—le saqué la legua, divertido.
—Claro que no—mintió. Sonrió con diversión. —. ¿Quién te dijo esa mentira?
—Tus gritos cuando—no me dejó terminar, abrió mucho los ojos y para callarme se puso de puntillas y me dio un beso. La sonrisa en mis labios no se pudo borrar, ni siquiera cuando se separó de mi con las mejillas rosadas.
Miró a los lados, inspeccionando que nadie haya escuchado. Arrugó su nariz y me dio un golpecito en el hombro. Se me hizo tierna.
—¡Cierra la boca!—me regañó. Solté una risa.
—Eso no decías el otro día—seguí con mis chistes malos. Olivia apretó los labios, enojada.
—¡Alec!
Me reí y envolví un brazo alrededor de su cintura, apretándola contra mí. Acerqué mi rostro al suyo y le planté un beso largo.
(***)11:17 p.m.
Había perdido a Olivia.
Literalmente, se me había perdido, o yo me le había perdido a ella, no sé. El punto es que no la encontraba por ninguna parte, creí que podía haber ido a la cocina por algo, pero ahí no estaba. Yo tan solo fui al baño unos minutos, ella estaba con unos amigos, pero cuando volví, ya no estaba.
Lo chicos me dijeron que ella había ido a buscarme. Aunque ella jamás llegó hasta el baño, me preocupaba que le hubiese ocurrido algo.
En el transcurso de mi búsqueda, me bebí alrededor de tres vasos llenos de whisky. Ahora me sentía más borracho que antes, yo era de ese tipo de persona que cuando se embriagaba parecía otro. Empezaba a hablar más, se me quitaba la vergüenza y me ponían medio caliente. Honestamente, mis mejores folladas habían sido ebrio, no es que sobrio no funcionara, pero con varios tragos encima funcionaba al triple.
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Los Desahuciados
RandomEn un grupo de amigos, siempre habrán los clásico: La chica escandalosa, dramática y sentimental, que todo la hace llorar, que es una soñadora y romántica empedernida. La que es amiga todos, la que tiene un carácter de los mil demonios, pero que ama...