Cuando descubres que tu realidad no es la única, ¿podrás diferenciarla?
Dicen que todos tenemos un destino, un hilo rojo, que nos une a nuestra alma gemela, la persona predestinada para ti, pero, qué tal, y ese destino o hilo rojo esta entrelazad...
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Despierto de golpe, me levanto y miro el reloj electrónico que esta sobre mi mesa de noche, son las cinco de la mañana, intento dormir, ya que aún me queda una hora antes de prepararme para ir al colegio, me giro hacia la pared de mariposas, cerrando los ojos veo a Wooki, los abro y sigo viendo sus ojos, ¿tanto me afecta él?
No conseguí dormir así que me puse a revisar mis redes sociales, viendo las fotos que tengo publicadas en Instagram veo una con Chris, ''El novio más perfecto del mundo'' decía en la descripción, recordando las palabras de Wooki, creo que tengo el valor para ponerle fin a esta mentira, elimino todas las fotos con Chris y subo una tomada recientemente, ''El mejor amigo del mundo'' escribo en la descripción, ya eres libre Chris, salte del susto en la cama al escuchar el sonido que todos odian, la alarma, a menos que sea tu canción favorita, de otra forma dudo que a alguien le guste.
Al llegar al colegio, las chicas son las primeras en recibirme, más un grupo de personas, todos me observan detenidamente, todo era muy extraño, hasta que por fin alguien se digna a hablar.
—¿Has terminado con Chris? —interroga una chica, pero, más que una pregunta parece una afirmación —¿cómo puedes terminar a alguien tan perfecto como él?, su perfección no te alcanza —al parecer la chica esta furiosa, y yo muy incómoda, parecía que iba a golpearme.
—Mejor para mí, así tengo una oportunidad con ese bombón —una chica morena anuncia.
—En todo caso ¿qué te hace creer que querrá salir contigo?, no tienes oportunidad —la chica enojada del principio estropea los sueños de la morena.
—Él puede salir con quien quiera y nadie, mucho menos una chica que él ni recuerda su nombre puede decidirlo —sentencio por fin, ya estaba bueno de esta pelea, Chris no es una galleta con la que se pueden pelear para ver quien la gana, cansada les paso por en medio para salir de ahí, pero una mano me detiene.
—Crees que puedes decir semejante estupidez, ¿te crees superior Jael? Ya que tú ya te lo comiste cierto, ¿no nos igualamos a ti? —la enojona volvió a decir.
—¿Qué estás diciendo ahora? —muy indignada por esa acusación, intento defenderme.
—Como dije, ¿hace cuántos años estas con Chris ?, ¿tres años ?, no te hagas la santa, o quizás ya te aburriste de él que decidiste engañarlo, por eso lo terminaste —cuantas barbaridades se le ocurre a esta mujer.
—Sabes que, no tengo porque entablar una clase de conversación contigo, porque uno, no te conozco y no te debo explicaciones y dos no se puede conversar con una persona irreflexiva. —intento salir de nuevo, pero esta chica sí que insiste en pelear.
—¡Oye! —la chica trata de llamar mi atención.
De nuevo me doy la vuelta tratando de averiguar qué quería decirme, pero lo que quería ella no era hablar, se abalanzó sobre mí, haciéndome caer, se subió encima de mi intentando golpearme, al instante freno sus manos, atrapándolas, mis amigas la sacan de ahí, y me ayudan a levantar, ya estoy harta de todo, hasta de que respiren cerca, no dejaría que esto se quede así, la aguante mucho tiempo, pensó lo que merece.
