XXVIII

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Narra Borja

- Raúl, por favor, respondeme. - Me apoyé en su puerta.

- No quiero, vete. - Chasqueé la lengua.

- ¿Sabes que puedo tirarte la puerta si quiero no? - Respondí intentando abrirla de nuevo.

- Ni se te ocurra, la pagarás tú. - Suspiré.

- Vamos. Ábreme. - Insistí. Esperé unos instantes y, finalmente, abrió.

¿Cómo Raúl podía disimular tan bien el estar llorando?

¿Por qué Raúl siempre llora?

- Como se te ocurra preguntar por qué lloro te aseguro que sales de aquí castrado. - Raúl y sus tiernas amenazas.

- Soy gay y no tendré hijos, pero necesito mis partes íntimas para hacerte gritar por la noche. - Respondí entrando y llevándole a la cama.

- ¿Qué se supone que haces idiota? - Gruñó dejándose caer en la cama.

- Evitar que te vayas corriendo por la puerta. - Me encogí de hombros. - No te muevas o será peor. Ahora, yo me sentaré en esta silla delante de la puerta y me contarás que ha pasado. Y no acepto no por respuestas. - Cogí la silla del escritorio y me senté.

- No te lo contaré. - Murmuró cruzándose de brazos.

- Perfecto, tengo todo el día. Y sabes que soy muy terco. - Me acomodé y saqué el móvil.

Raúl no hablaba, yo tampoco. Solo se oía a Raúl sorbiendo por la nariz y las teclas del aparato.

El tiempo pasaba sin prisa, Raúl jugaba con sus dedos y yo con el móvil. De vez en cuando levantaba la mirada para ver que hacía.

Y lo que hacía era mirar a todas partes de su habitación, mirarme a mi o mirar por la ventana.

Raúl siempre estaba en su pequeño mundo donde él era el único personaje y todo lo demás no importaba.

- ¿Me lo contarás? - Pregunté tras un rato.

- No. - Rodé los ojos.

- ¿Cómo pretendes que arreglemos esto si no confías en mi? - Me apoyé en la silla.

- ¿Para que termines contándoselo todo a tus amiguitos? Paso. - Raúl bufó.

- ¿Cuándo he hecho yo eso? - Arqueé una ceja.

Nunca había contado nada íntimo de Raúl a nadie.

Creo.

- Tu grupo es muy... Miserable. ¿Qué me dice que tú tampoco lo eres? Las experiencias hablan por si mismas. - Raúl se levantó de la cama y puso algo de música.

Clásica, por supuesto.

La sala se llenó de la melodía del piano.

- Esta pieza me gusta especialmente. Es de Franz Gordon y me transmite mucha melancolía. - Mi mirada seguía los pasos de Raúl. - A veces pienso... ¿Qué hubiera pasado si hubiera aceptado irme a Londres con mis padres? ¿Y si Jaume y Dani siguieran a mi lado? ¿Y si me hubiera quedado en París?

🍒Cherry🍒 (Luzuplay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora