🍒Cherry🍒 (Luzuplay)

XVIII

Narra Raúl

- ¿Seguro? - Preguntó Alexandre por milésima vez.

- Segurísimo. - Respondí sin dudarlo.

- Dame una razón válida. - Volvió a insistir él.

- Es mi felicidad y mi vida. Ya sabes los otros motivos. - Me encogí de hombros. Esta conversación se volvía aburrida.

- Eres más feliz aquí, gatito. No puedes negarlo. - Respondió Alexandre rodando los ojos.

- No puedes saber donde estoy más feliz si no has visto en España querido. ¿Te recuerdo lo mal que lo he pasado en París? ¿O lo que tus queridos mojabragas me hicieron? Tengo una larga lista de cosas por contar.- Me crucé de brazos encarándole.

- Bueno, pero aquí nos tienes a Nath, a nuestros amigos, a mi para todo. Eso es pasado. - Alexandre acarició mi mejilla. Me aparté bruscamente.

- ¿Y por qué no puedes dejar en el pasado lo de España? Borja y yo podemos hablar bien las cosas y solucionar lo que se pueda solucionar. - Me apoyé en la mesa más lejana a él. - ¿Por qué todos creéis saber mejor que yo que es lo mejor para mi? Soy mayor y racional, puedo tomar decisiones por mi solo, ¿Sabes?. - Respondí molesto. Todos me trataban como si fuera de porcelana.

- Pero queremos que entiendas las oportunidades que te estás perdiendo aquí. - Añadió acercándose. Me alejé.

- Yo no veo oportunidades. Solo me queréis porque sabéis que conmigo podéis hacer casi lo que queráis. - Rodé los ojos.

- Te repito: tienes una beca para enfermería, puedes meterte en el conservatorio ya que eres maravilloso con el piano, puedes compartir piso o no, puedes tener trabajo. Puedes tener una vida maravillosa en París, encontrar a alguien que te quiera y te trate bien. No que te haga llora... - Fruncí el ceño. Ya estábamos de nuevo con las mismas palabras.

- No, no, no, no. No te permito hablar así de Borja, Alexandre. No le conoces, no has hablado con él, no sabes nada de él. - Murmuré. No quería empezar una pelea por tonterías. - Borja y yo hemos cometido muchos errores, pero eso no te da derecho a hablar de esa forma de él. No te permito que le faltes el respeto. - Respondí con dureza.

- Vale, perdóname. - Respondió. - ¿Puedo acercarme ya e ir a comprar? Se nos hace tarde. - Negué con la cabeza.

- Que te jodan. - Respondí yendo a la habitación.

[...]

Llegué a la habitación y entré cerrando con cerrojo. Creo que no había cosa que me enfadara más que la prepotencia y el saber más de una persona que la propia persona.

Realmente en París estaba genial. Estaba en un ambiente en el que me sentía muy cómodo, rodeado de gente que me hacía sentir querido y me daba la atención que precisaba.

Pero no podía dejar mi vida así como así. No podía abandonarlo todo y empezar de cero. No de forma tan abrupta e improvisada.

Resoplé cansado, Alexandre llamó a la puerta.

- Sal. - Pidió. - No actúes como si fueras tan inmaduro.

- Déjame. Voy a llamar a Angel. - Rodé los ojos.

- Raúl, por favor. - Murmuró.

- Cállate. - Repetí enfadado.

- No me gusta amenazarte, mon chérie. Pero deberías hacerme caso. La última vez que te castigué estuviste una semana suplicando que te perdonara. ¿He de repetirlo? - Me quedé sin palabras. Los castigos de Alexandre eran, realmente, castigos.

- Castígame. Me da igual. - No, realmente no me daba igual.

- Perfecto. Te espero en el salón. No te molestes en llevar ropa. - Respondió. - Ya eres mayor para aprender como comportarte. - Alexandre se alejó. Con un poco de suerte me disculpaba y el castigo quedaba en el olvido.

Pero Alexandre no era de los que perdonaban rápido.

Hace un tiempo

Narra Raúl

- Esta es una paleta con gravado. - Asentí suavemente viendo el objeto. - Y con esto serás castigado. Y no, no será más placentero que doloroso. Aunque te guste el dolor, esto no te va a gustar. - Explicó. - El gravado es sutil. Pone "Slut" en una bonita letra cursiva. Justo lo que eres. - Tragué saliva con nervios. Tenía curiosidad por el objeto pero a la vez le tenía respeto. No te azotaban cada día con una paleta con un gravado denigrante. - Así aprenderás a respetarme.

- Me lo merezco, daddy. Necesito que me enseñes a como comportarme. - Respondí con las mejillas ardiendo de vergüenza.

- Serán cinco azotes. Quiero que los cuentes en voz alta. - Asentí con un "Vale daddy". - Ponte en posición, ángel. Y acata sumisamente tu castigo.

Notas

FELIZ NAVIDAD Y FELICES FIESTAA A TODOS, TODAS Y TODES.🎄❤️. Espero que, a pesar de la situación actual, podáis estar con aquellos que queréis respetando las normas. ¿Os ha traído algo Papá Noel (o Santa Claus)? A mi un reloj jsj.

Dicho esto, capítulo random y con leve mención al Daddy kink y castigos jaj

No me gusta nada este capítulo, pero poco más puedo hacer.

Btw ayer me pedí 47 fotos más de Harry y Lou para decorar mi pared jsjsj.

Voy a comprarme la cenita jaj

Espero vuestros comentarios❤️