🍒Cherry🍒 (Luzuplay)

XXIV

Narra Borja

Me dirigí a casa de Marco. Tenía mucho que aclarar antes de volver a Barcelona y que todo se desmoronara de nuevo.

Llegué y llamé. Esperé pacientemente hasta que abrió.

- ¿Borja? - Murmuró bostezando. - Pasa. - Se apartó de la puerta dejándome entrar y, cuando estuve dentro cerró la puerta.

- Lo nuestro es sexo esporádico, Marco. - Dije yendo con él hacia la cocina.

- Lo sé. - Respondió preparando dos tazas de café.

- ¿Por qué le llamaste y cómo conseguiste su número? - Pregunté en un tono relajado, no quería pelearme y menos hoy que volvía a España.

- Lo saqué de tu móvil. - Respondió sirviendo el café.

- ¿Había necesidad de llamarle? No sabes como es Raúl. No tienes ningún derecho a amenazarle. - Bebí de la taza para evitar estamparle contra la pared y reventarle a puñetazos.

Estaba un poco agresivo.

- Tú llamaste a su novio. ¿Y no te recriminas nada? - Respondió él cínicamente.

- Me llamaron diciendo que Raúl salía con el francés, que iba a quedarse ahí y que no me molestara en llamarle ni en comunicarme con él. - Hice una pequeña pausa. - Tú no fuiste atacado, no fuiste incluido en nada para llamar a Raúl. A ti, él, no te afecta en nada. - Mi tono se alzó demasiado.

- Eso no te da derecho a privar a nadie de nada. - Respondió Marco.

- Antes de que me cuestiones, sé tú un ejemplo. No debiste llamar a Raúl. No debiste decirle nada. - Gruñí. La rabia me estaba consumiendo.

- Bueno, yo te hice el favor de intentar quitarte a ese capullo de encima. - Cogí aire pesadamente y lo solté.

- ¿Sabes? Espero que de aquí a un año, mínimo te encuentres tres metros bajo el suelo. - Salí de su casa y me dirigí a la mía.

Hijo de puta.

[...]

Llegué a casa casi jadeando. Necesitaba hablar con Chiara antes de arrepentirme y arrancarle la cabeza a Marco. Me dirigí al salón y me apoyé en la pared.

- ¿Mamá? ¿Puedo hablar contigo un momento? - Pregunté esperando una respuesta positiva.

- ¿Vamos al despacho? - Respondió levantándose. Asentí y nos encaminamos.

Como echaría de menos ese despacho.

Entramos y cada uno se sentó en su sitio correspondiente. Definitivamente Chiara me había mejorado la vida.

- ¿De qué querías hablar? - Preguntó sacando la famosa libreta.

- ¿Vas a escribir la conversación? - Respondí viendo como pasaba las páginas.

- Me gustaría tener un pequeño resumen de tu evolución. - Se acomodó esperando pacientemente a que hablara.

- He ido a ver a Marco y dejarle claro que lo nuestro es sexo esporádico. - Conté. - Le pregunté como consiguió el número de Raúl y el porque de su llamada. - Chiara apuntaba cosas en la libreta.