Despedida

117 11 1
                                        

Había dormido poco o nada. Lograba ver el reflejo de los primeros rayos del sol en el techo de su cuarto. Se preguntaba si fue la mejor decisión que pudo tomar. Hacía tiempo que la comunicación con los ex portadores del One for All se había vuelto más fluida, por eso entendía que el momento de enfrentarse a su némesis estaba muy cerca.

El hermano menor de su enemigo estaba seguro de lo que se debía hacer para detenerlo y él mismo no dudaba, debía ser eliminado. Se preguntaba si tendría la fuerza necesaria o el valor necesario para quitarle la vida a alguien, por más malvado que fuera. Debía mentalizarse, no había espacio para la debilidad ahora, todo dependía de él, o de ellos.

Lamentaba no haberlo consultado con su mentor, pero hace unos días no tenía contacto con All Might. No contestaba sus llamadas y todos los profesores evadían sus preguntas, sólo esperaba que estuviera bien. Después de charlar un par de veces con los portadores, comprendió que todos habían tenido su final al enfrentarse con el enemigo, ahora le tocaba a él. Era por mucho el menor de los portadores que batallaría con el All for One, pero debía asegurarse que su destino fuera diferente. Fue por eso que decidió compartir su secreto. A pesar de que algunas personas cercanas a All Might sabían de su singularidad y su misión, ninguno pudo ayudarlo. Ahora él tenía a su amigo de la infancia y dos amigos de la academia que podían estar casi a su nivel. Incluso si él fallaba, sabía que Kacchan no se dejaría vencer y que podría hacerle frente con Todoroki y Kaminari.

No se arrepentía de haber compartido su secreto, con tal de asegurar la derrota de All for One de una buena vez. Después de todo, ya todos estaban en gran peligro, en lugar de protegerlos al ocultarles la verdad, sólo los estaría exponiendo más. Se levantó con pesar de la cama, aún tenía que conversar con el rubio eléctrico y coordinas con los demás para poder llevar a cabo su plan.

Jiro: ¿Qué sucede? –Desde que su novio regresó de la charla con el peliverde no la había soltado. – ¿Sí desayunaste? –El rubio asintió. –Me estás preocupando Denki, ¿Qué pasa?

Kaminari: Nada, sólo quiero abrazarte. –La chica no sabía qué hacer, sabía que le estaba ocultando algo, pero o quería presionarlo, se veía deprimido. Se acercó a él y lo besó con ternura.

Jiro: Está bien, también me gusta abrazarte. –Acariciaba su cabello con delicadeza, repasando su marca de rayo.

Kaminari: Lo siento.

Jiro: ¿Por qué?

Kaminari: Por molestarme contigo esa noche, estaba muy frustrado conmigo mismo y no supe manejarlo bien.

Jiro: Nunca dije que estuviera molesta por eso. Me pareció tierno que te preocuparas por mí, pensé que era normal las primeras veces, el tener que soportar el dolor y eso. Ahora sé que eres diferente y me gusta mucho saber que tengo un caballero a mi lado. –Sonreía contenta, aunque no fuera ese el tema que lo tenía angustiado, le alegraba que soltara al menos una de las cosas que tenía en mente. –Te quiero Denki, pase lo que pase, así que quita esa cara, ¿sí? Te juro que no sé qué hacer.

Kaminari: Lo siento, no quería preocuparte, solo quiero tenerte cerca. –Le agobiaba pensar en que esa misma noche sería parte de una especie de misión suicida a la que no pudo negarse después de conocer los detalles.

Jiro: Bueno... ya que hoy se cancelaron los entrenamientos y prácticamente tenemos el día libre... podríamos... estar más cerca. –Se le hizo difícil soltar la propuesta, esperaba que fuera suficiente para que él pudiera entenderla sin necesidad de repetirse. Aunque aquella noche resultara no tan bien, sabía que después tendría más posibilidades de disfrutarlo, tanto como él y quería que ese momento llegara pronto.

Kaminari: Pensé que mi Kyoka traviesa estaría tranquila un buen tiempo después de lo que pasó, veo que me equivoqué. –Sonreía divertido. –Es una propuesta tentadora, pero preferiría poder hacerlo cuando regrese. –Si lograba regresar, pensó.

My Messy AcademyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora