Jiro: Están locos todos.
Kaminari: Pero fue divertido.
Los chicos paseaban por el camino que conectaba la residencia con el campus. Tuvieron que salir rápido de la sala antes de terminar quemados. La chica estornudó y se abrazó a sí misma.
Kaminari: Lo siento, no tenía que jalarte conmigo. –Se sacó la polera y se ubicó detrás de ella. Colocó la polera sobre la cabeza de la chica y la hizo pasar hasta el cuello.
Jiro: ¡¿Qué haces?!
Kaminari: Cuidando que mi novia no se resfríe. Levanta las manos.
Jiro: ¡No! Yo puedo vestirme sola. –La chica no sabía cómo reaccionar a las sensaciones que le provocaba el rubio cuando se le ocurrían ese tipo de detalles.
Kaminari: Ya sé que puedes, pero quiero hacerlo yo, ¿o prefieres que te desvista? –La chica se quedó fría y levantó los brazos dejándose hacer. –Bien, niña buena.
Jiro: ¿Cómo puedes decir esas cosas con tanta facilidad?
Kaminari: ¿Qué cosas? ¿Qué eres una niña buena?
Jiro: No, sobre desvestirme. –Ahora ambos estaban rojos, el chico no había considerado los significados que podía tomar esa frase.
Kaminari: ¡No, no! No lo decía en ese sentido, lo juro, sólo estaba jugando con las palabras, ya sabes vestir/desvestir. Lo siento, no quería ser grosero. –La chica suspiró, no estaba incómoda por eso. Más bien, en ese momento se sentía repentinamente desanimada.
Jiro: No te preocupes, entiendo que seas bobo. –El chico se preocupó un poco, sonaba apagada.
La abrazó por la espalda y dejó un beso en su cuello. La chica intentó separarse, pero él la sostuvo fuerte.
Kaminari: No estés molesta conmigo.
Jiro: ¡No lo estoy! En serio no, pero por favor suéltame.
Kaminari: ¿Ves? Si estás molesta, no pienso soltarte.
Hundió su rostro entre el cuello y hombro de la chica. Tomó aire profundamente sintiendo su aroma. Le encantaba todo de ella. Incluso cuando se molestaba con él y le clavaba las extensiones. Apretó un poco más su abrazo.
Su cintura era tan delgada, no recordaba haberla abrazado directamente, aunque sabía que lo hizo la noche que descubrieron su compatibilidad. Era muy delgada, a pesar de que tenía la polera gruesa podía cruzar completamente sus brazos. Empezó a darle pequeños besos en el cuello y parte de la quijada.
Jiro: Den... Denki para... -Se le hacía difícil respirar. Se sentía cada vez más caliente y dudaba que fuera cosa de la polera.
Kaminari: No quiero. –Continuó besando el borde de sus orejas y sus extensiones. Tomó una de las extensiones con los labios y la jaló para poder alcanzar la punta.
Jiro: Denki... por favor, no... -El tono de su voz había cambiado. Esperaba que el chico no lo hubiera notado.
El rubio se detuvo, recordó que la chica le había mencionado que sus extensiones eran sensibles y no quería lastimarla. Incluso cuando practicaban trataba de sostener sus jacks con la mayor delicadeza posible e intentaba intercalarlos para no sobrecargar sólo a uno. Le dio un beso en la cabeza y la soltó.
Kaminari: Lo siento, son pocas las veces que tenemos un momento para los dos. –Tomó su mano. –A veces se me hace difícil controlarme, así que, si te incomodo, no dudes en atacarme con tus jacks, no me quejaré. –Sonreía.
La chica se sorprendió por lo calmado que estaba, tan solo unos segundos atrás ella sentía que se le iba a salir el corazón, el alma y tal vez el estómago. ¿Cómo podía perturbarla tanto, parar de repente y sonreír así?

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My Messy Academy
RomanceDespués de la batalla contra el Frente de Liberación Paranormal (FLP) la sociedad de héroes debe enfrentarse a nuevos cambios. Pero primero debe velar por la recuperación de los héroes heridos en combate. Tres estudiantes de la UA se encuentran aún...