Diversas situaciones en las que el lindo Hyunjinnie se siente pequeño, y sólo desea hacer lo que todo bebé ama:
Jugar con sus peluchitos, tomar de su biberón, y recibir muchos abracitos por parte de sus compañeros, que, por cierto, lo miman demasiad...
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Chan soltó un suave bostezo tras dar varias vueltas en su lugar, estirándose a fines de eliminar el cansancio que llevaba consigo, dejando que sus huesitos sonaran de la forma más placentera del mundo. A pesar de estar rodeado por todas sus almohadas, su cama se sintió muy vacía; Hyunnie había decidido quedarse con Changbin aquella noche.
Chris no había podido conciliar el sueño porque le faltaba la tierna respiración de su bebito a su lado, y los lindos soniditos que dejaba escapar a causa del chupete que succionaba inconscientemente, incluso cuando estaba dormidito.
Tomó su celular de la mesita de luz, observando la hora; eran las cuatro de la mañana y aún no había podido encontrar una posición cómoda. Con un poco de frustración debido a su insomnio, se levantó para ir en busca de un té que le provocara la tranquilidad suficiente como para poder descansar de una vez por todas. ¡Estaba exhausto! Había trabajado toda la semana entera y su cuerpo no lo soportaría mucho más.
Al llegar a la cocina, notó que las luces estaban encendidas, por lo que dedujo que alguno de los chicos estaba despierto. Se asomó con tranquilidad, encontrándose con una tierna y curiosa imagen.
Minho estaba sentado sobre la encimera; sus piecitos colgaban y se movían a los lados porque no llegaban a tocar el suelo. Entre sus manos sostenía un biberón que contenía agua hasta la mitad, al que le daba suaves sorbitos de vez en cuando, mientras miraba a su osito de peluche, que estaba reposado a su lado, posicionado de la misma forma que él y parecía hacerle compañía, con el chupete del muchacho entre sus patitas de felpa.
Todos los objetos que Lino adoraba en su Little Space estaban con él, y este parecía encontrarse tranquilo, metido en sus propios pensamientos.
El rubio se acercó pacíficamente, recibiendo una pequeña sonrisa por parte del castaño cuando lo observó ingresar.
"Hola, Chan..." Lo saludó con un suave tono de voz, dándole otro sorbito a su biberón de forma despreocupada. "¿Insomnio?"
"Al parecer, me cuesta conciliar el sueño si ninguno de ustedes está a mi lado, haciendo esos extraños y tiernos soniditos con sus chupetes"
Ambos rieron bajito; no querían despertar a los demás. Chris impulsó su cuerpo para sentarse en la encimera, de la misma manera en la que el otro joven se encontraba.
"¿Y ustedes? Es muy tarde como para que estén despiertos..." Preguntó juguetonamente, incluyendo al osito de peluche en la conversación, dejándole unas suaves palmaditas en la cabeza que le causaron gracia al contrario.
"Nosotros tampoco podemos dormir, Channie" Minho le siguió el juego, tomando a su amigo de felpa para posicionarlo entre sus piernas, manteniéndolo cerquita de él.
Chris permaneció en silencio por unos segundos, admirando las expresiones relajadas del castañito mientras este tomaba agua con tranquilidad, aún moviendo sus pies suavemente.
