Diversas situaciones en las que el lindo Hyunjinnie se siente pequeño, y sólo desea hacer lo que todo bebé ama:
Jugar con sus peluchitos, tomar de su biberón, y recibir muchos abracitos por parte de sus compañeros, que, por cierto, lo miman demasiad...
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Aquel día, Christopher estaba muy emocionado, pues Hyunjin se encontraría dentro de su little space durante Navidad, y eso le provocaba una felicidad enorme, teniendo en cuenta que ahora debía pensar una manera de sorprenderlo.
Lo bueno de esas fechas era la presencia de niños, ya que ellos le otorgaban esa pizca de magia al día, porque todos los adultos se las ingeniaban para sorprender a los jovencitos, y Christopher lo único que deseaba, era que su pequeño tuviera unas bonitas fiestas.
"¡Minho, esconde eso!" Gritó Chris cuando lo vió entrar con una caja envuelta en papel de regalo.
"¿Por qué hyung? ¡Iba a colocarla debajo del árbol!"
"¡Aún no! Hyunjin todavía cree en Santa Claus, y si llega a ver eso antes de Navidad, comenzará a sospechar" Habló calmado, volteando un poco para ver a Hyunjin durmiendo hecho una bolita en el sillón, con su cabeza apoyada en las piernas de Changbin, quien lo mimaba y observaba con amor; ambos, junto a Felix y Jeongin, habían estado decorando el árbol de navidad, y el pequeño había quedado exhausto.
"Puedes guardarlo en mi habitación, mis regalos están allí y cerraré con seguro para que no pueda entrar" Changbin le susurró a Minho porque el menor aún se encontraba demasiado cerca de él y temía que escuchara lo que acababa de decirle a su amigo, quien asintió lentamente y se dirigió a la habitación del chico.
Durante aquel suceso, Christopher se dedicó a colocar diferentes adornos por toda la casa, mientras Felix hacía galletas y se encargaba de la cena.
Por el momento, el evento iba bien. Afuera hacia demasiado frío y Minho había insistido en vestir a todos con horribles suéteres navideños para luego tomar una foto familiar. Ahora, todos parecían unos ridículos.
Cuando la cena estuvo lista, Changbin se dedicó a despertar al bebito de la casa y darle un rápido baño, antes de llevarlo a la mesa junto a los demás. Hyunjin se quejó un poco porque tal actividad había sido tan veloz que ni siquiera tuvo tiempo de jugar con su patito de hule, y mientras el pelinegro le colocaba unos calzoncillos limpios, él comenzó a hacer preguntas que lo pusieron muy nervioso.
"¿Santa vendrá pronto, hyung?" Inquirió curioso, cuando la toalla le cubrió el rostro al momento en el que comenzaron a secarle el cabello con ella.
"Uh, sí, supongo..."
"¿Y él estará viajando en su trineo mágico por todo el mundo para dejar regalitos?"
"Exacto..."
"¿Tú lo conoces?"
"Hey, ¿De dónde sacas tantas preguntas, niño?" Se quejó mientras le indicaba que levantara sus bracitos, para que él pudiera colocarle el suéter horrible que Minho quería que todos llevaran; el del menor era rojo, y tenía varios patrones que combinaban renos y bastones de caramelo.
"E-Es que Santa me da un poco de miedo, hyung" Murmuró, jugando con la toalla mientras movía sus piecitos y Changbin lo peinaba.
"¿Te asusta?" Hyunjin asintió tímidamente, haciéndolo reír. "No te preocupes, puedes quedarte conmigo cuando él venga a dejar los regalitos, te daré la mano para que te sientas seguro..." Lo tranquilizó, recordando que cuando él era pequeño, también le temía a Santa Claus y su mamá lo abrazaba para que dejara de llorar.
