Diversas situaciones en las que el lindo Hyunjinnie se siente pequeño, y sólo desea hacer lo que todo bebé ama:
Jugar con sus peluchitos, tomar de su biberón, y recibir muchos abracitos por parte de sus compañeros, que, por cierto, lo miman demasiad...
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Tras una larga semana de descanso para Stray Kids, las actividades volvieron a formar parte de su rutina.
Apenas era el primer día de trabajo y todo ya se había vuelto monótono y aburrido; Todavía no eran un grupo demasiado conocido, y por eso mismo, se encargaban de esforzarse al máximo para mejorar y alcanzar a más personas.
Asimismo, estaban todos tan ocupados con los proyectos que debían concretar, que Hyunjin tuvo que salir muy rápido de su Little Space para no quedarse atrás con respecto a las nuevas y viejas coreografías, sufriendo algunas secuelas al no haber sido capaz de atravesar un proceso lento y paulatino:
Se había forzado a actuar como un adulto cuando claramente no estaba listo para ello, por lo que aún no podía evitar dejar salir a la luz algunos hábitos de niño pequeño que no querían abandonar su conducta.
Eso pudo notarse cuando a mitad de la noche, tocó suavemente la puerta de una de las habitaciones de sus amigos.
"¿Chan?" Su dulce voz rompió el silencio, y el rubio volteó sobre su propio peso para poder ver al joven.
"¿Qué sucede, Hyunnie?"
"N-no puedo dormir..." Murmuró con vergüenza. Aquella noche, había intentado volver a su habitación y continuar con su vida adulta, sin embargo, había estado dando muchas vueltas en su camita, sin poder lograr descansar ni un poco.
Se había acostumbrado a dormir con Channie y ahora no podía hacerlo sin él; necesitaba de su calorcito, sus mimos y sus brazos protectores alrededor de su cintura.
"¿Intentaste usar tu chupete? Siempre te da sueño cuando lo tienes por mucho tiempo..." Le preguntó con la voz ronca; el rubio estaba muy cansado, pero no podía dejar de pensar en buscar una solución para el problema de su bebé, quien asintió a modo de respuesta.
"Incluso traté de abrazar a Copito, pero nada funciona. Te necesito..."
Christopher no dijo absolutamente nada, simplemente se movió a un lado, dejándole espacio al chico, abriendo las sábanas para él y estirando un brazo con el fin de ser capaz de rodearlo cuando se acomodase cerquita.
"No debiste forzarte a salir de tu Little Space así de rápido, Hyunnie..." Suspiró mientras le hacía unos cuantos mimos, intentando lograr que el chico finalmente pudiera dormir y permitiéndole apoyar la cabeza sobre su pecho porque sabía lo mucho que sus latidos lo tranquilizaban.
Chris estaba preocupado, pues sabía que Hyunjin se había vuelto a quedar varado entremedio de su comportamiento adulto y pequeño. No era nada grave, pero probablemente tendrían que atravesar un par de días en los que el castañito adoptaría una sensibilidad muy grande, y sería propenso a llorar por cosas insignificantes o desesperarse por no encontrar su chupete en momentos de estrés. Cada vez que sucedía, el pobre se sentía completamente perdido, en una lucha de dependencia y autonomía constante;
