Un joven Dante se encontraba tocando su piano como lo hacía tantas veces por las tardes. Con tan sólo 21 años, el joven estaba en su mejor momento al tener buenas calificaciones en la universidad y poder hacer lo que le gustaba. De repente, el azote de la puerta a lado de su cuarto hizo que se detuviera a mitad de la canción.
–¿Qué es lo que pasa? — Preguntó viendo a su hermano César de pasar a su habitación. –Cesar. — Le llamó
–Pues lo de siempre, Dante. Selene se peleó con nuestros padres porque no la dejaron salir con sus amigas. – El mayor de los hermanos se quedó en silencio, pero miró como su abuelo estaba llegando a la puerta de la habitación de la chica.
— Abuelo. –
– Solo quería platicar con ella. Hacerla entender que hemos recibido amenazas y por ello debemos mantenernos al margen de todo. – Comentó el hombre de mayor edad viendo con tristeza a su nieto. – Lo siento. —
— No Abuelo. No es tu culpa, creo que todos sabemos a lo que estamos expuestos. Yo hablaré con ella. — Era obvio que todos en la familia estaban en constante peligro a ser una familia que trafica droga. Pero Dante comprendía a su hermana, él también estaba cansado de no poder hacer todo lo que los otros chicos de su edad hacían.
Dante tocó la puerta unas cuantas veces sin respuesta alguna, así que entró al cuarto de su hermana encontrándose con ella llorando en su cama.
—Selene. — Llamó a su hermana quien no dejaba de llorar.
— ¿Por qué nací en esta familia? Solo quiero ir al cine con mis amigas. —
— Lo sé, no sólo tú. César y yo también nos hemos perdido de mucho por la situación de la familia. Pero debes de comprender que no hay nada que nosotros podamos hacer. — Dante se acercó a acariciar la cabellera de su hermana para tratar de consolarla un poco, pero parecía inútil. — ¿En verdad tienen muchas ganas de ir? —
— Es el cumpleaños de Susana, nuestro plan es ir al cine y después cenar algo, nada más. — El hermano mayor se quedó pensativo unos minutos y fue entonces que hubo una idea.
— ¿Les dijiste cuando ibas a salir? —
—No, ni siquiera me dieron oportunidad de decirles cuando. — Mencionó aún más triste Selene.
— Entonces ¿Que tal si sales conmigo al cine ese día que vas a ver a tus amigas? — Dante le guiñó el ojo a su hermana que captó inmediatamente la idea de su hermano.
– ¡Hermanote! — La chica abrazó con fuerza a su hermano quien riendo le explicó todo lo que iban a hacer ese día, con detalles para que nadie sospechara. Ambos se pusieron de acuerdo y planearon todo.
Era la tarde acordada, Dante pudo convencer a sus padres de que los dejaran salir a ver una película, de igual forma de llevarse el carro del abuelo. Dante estaba conduciendo y Selene estaba emocionada de poder ir con sus amigas, en el camino estuvieron repasando los horarios y el lugar donde se verían después.
— 9:30pm aquí mismo. Ni un minuto tarde. — Comentó el mayor viendo la sonrisa de su hermana.
— Por supuesto hermano, te amo. — Dante sonrió al ver como su hermanita se iba y saludaba a sus amigas. Se alegraba tanto de poder ayudarla, mientras ella estaba en sus asuntos, el chico se fue encontrándose con un amigo suyo, ambos se dirigieron a un billar donde estuvieron platicando y tomando unas cervezas, las horas pasaron volando, Dante se despidió de su amigo e incluso lo acercó a su casa para después ir por su hermana, pero había trafico y varias patrullas se encontraban entrando en la plaza, fue entonces que las alertas de Dante se encendió y dejó su auto estacionado en una orilla para correr en dirección a donde estaba la plaza. Fue entonces que notó que había una multitud corriendo de un lado a otro, pero otro puño estaba rodeando a alguien, era el mismo punto donde se encontraría con Selene.
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La luz de mis ojos (Historia LGBT) (~2Temp ~)
Roman d'amour2da. Temporada Próximamente Bernardo Noriega es un hombre que desconoce sus propios sentimientos de manera literal, no sabe mucho acerca de estos ya que desde que tiene memoria solo recuerda sufrimiento, dolor, sangre y muerte, siempre manteniéndose...